Incertidumbre en el Poder Judicial

Luchas intestinas dejan en vilo titularidad en el TSJ
Magistrados disidentes intentan nombrar a reemplazo de Cuevas López; les faltó quórum
Difunde la magistrada afectada por decreto comunicado donde asegura que ya fue amparada

Incertidumbre en el Poder Judicial
En los momentos que en el TSJ se cocinaba el relevo de Carmen Cuevas López, apareció una alarma por una supuesta bomba en el inmueble. Tras una revisión, se encontró un sospechoso artefacto que fue levantado por cuerpos de seguridad que harían posteriormente la revisión de lo hallado. El personal administrativo tuvo que ser desalojado.

Para nombrar un nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), ayer se convocó a una sesión de Pleno solemne, a las 13.00 horas, por el denominado “decano” magistrado, Andrés Hipólito Prieto, derivado de un decreto publicado el martes, que derogó la extensión a 20 años en el periodo de los magistrados, entre ellos a María del Carmen Verónica Cuevas López quien, con base en ello, dejaba de ser la titular de la institución.

Por lo anterior, desde muy temprana hora el concilio se comenzó a preparar en las oficinas de los magistrados Hipólito y Luis Jorge Gamboa. Sin embargo, al momento de llevarse a cabo, sólo se presentó la facción opositora a Cuevas López, los magistrados Juan Emilio Elizalde Figueroa, Rocío Bahena, Ángel Garduño, Bertha Leticia Rendón, Carlos Iván Arenas, Luis Jorge Gamboa, Andrés Hipólito Prieto, Norberto Calderón y Nadia Luz María Lara.

Se dio comienzo al pleno con solo 9 integrantes. Pese a que una alarma en el edificio advertía sobre la necesidad de desalojo, los magistrados y sus equipos de trabajo permanecieron en el lugar, después de habilitar a una secretaria para que pasara lista, se dio por aviso que “no existía el quórum suficiente”, pues en el caso legalmente se establece que son dos terceras partes de los integrantes quienes deben estar presentes.

Aunque los argumentos de Carlos Iván Arenas, Norberto Calderón y Rocío Bahena fueron de que se llevara a cabo el pleno “con solo 9 funcionarios”, se apegaron a los lineamientos, siendo Bertha Rendón quien sentenció que “de hacerlo así, incurrirían en lo que tanto señalan en contra de otros compañeros”.

En el uso de la palabra, Calderón enfatizó y ordenó que María del Carmen se abstenga de realizar todas y cada una de sus funciones de forma inmediata, y que permita con ello la consecución de los trabajos y actividades de los magistrados, tal como lo era en ese momento, el nombramiento de un nuevo presidente.

Dentro de sus explicaciones, los mismos magistrados señalaron que habían previsto “alguna situación de sus opositores, para que no se llevase a cabo el pleno”; esto, refiriéndose a la supuesta amenaza de bomba, que ocasionó el desalojo del personal administrativo del inmueble.

Al finalizar la reunión, algunos funcionarios señalaron que necesitan, cuando menos, a dos magistrados más, para conformar así dos terceras partes de la mayoría y pueda ser válida la elección de un nuevo presidente, siendo ésta la razón por la cual el día de hoy no se conformó el quórum necesario.

También aclararon que la votación para elegir un presidente, que requiere a 11 magistrados de 17, con derecho a voto, no es similar a un pleno ordinario, en donde solo se necesita el 50 por ciento más uno para que se aprueben los puntos.

Al tenor de esta aseveración, Andrés Hipólito y Nadia Luz María Lara hicieron un llamado para que sus colegas no presentes, identificados como pertenecientes al grupo de Cuevas López, se condujeran con imparcialidad y asistan a la siguiente convocatoria. Les pidió “recapacitar” sobre anteponer el derecho individual al público, y aseguró que es de vital importancia nombrar un titular para que el Poder Judicial tenga representatividad.

Andrés señaló que serán las autoridades federales quienes desahogarán la situación actual. Sin embargo, en lo que interpone los recursos legales y se le otorgan a Cuevas López, ella debe dejar, por la vía de la paz, el cargo, sin que eso provoque en ella algún ahínco, apuntó.

“Cuando fui inhabilitado, yo me amparé, pero antes de eso, correspondiendo a mi ética y a mi respeto a los lineamientos establecidos, yo entregué lo que me tocaba; dos años después que fui nuevamente reinstalado, retomé las cosas. Así es como se deben de hacer las cosas, con responsabilidad”, señaló Hipólito Prieto.

Aun después de finalizado el pleno los magistrados y sus equipos de trabajo continuaron dentro del lugar, sin dejar de señalar que “todo era un montaje de los contrarios”.

 

Presunto amparo para Cuevas López

En el desarrollo de lo que se vivió ayer en el Tribunal, las oficinas de María del Carmen se notaron vacías, no se la observó caminando por los pasillos ni en su privado, durante la mañana y parte de la tarde.

Posteriormente, el equipo de Comunicación Social del TSJ envió un comunicado en el que aseguraba que Verónica Cuevas había sido amparada por la justicia federal: “…el Juez Federal otorgó suspensión provisional a Cuevas López. Esta resolución favorece y ratifica la supremacía constitucional, los valores de independencia judicial y a la estabilidad del estado. La autoridad judicial federal, da certeza legal y jurídica para que la Magistrada Cuevas López continúe como Presidenta hasta mayo de 2020”.

El Regional pudo confirmar que en el Juzgado Octavo de Distrito, en Morelos, se solicitó formalmente el amparo 1222/2019, aunque no se tuvo la certeza de que éste haya sido otorgado, como lo establece el comunicado referido.

 

Encuentran presunto artefacto explosivo en el estacionamiento

Después de que el edificio fue desalojado, así como el edificio de guardería del Poder Judicial, por la supuesta amenaza de bomba, se difundió que personal de protección civil que realizó recorridos por todo el perímetro logró ubicar un “presunto artefacto explosivo” en el área de estacionamiento.

Ante el hallazgo, se solicitó a personal especializado su arribo. Fue por ello que varios minutos después, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) expertos en la materia, acudieron al sitio.

Portando un traje de protección, un elemento militar procedió a acercarse al objeto. Tras analizarlo detenidamente, el especialista colocó un medio de contención alrededor del artefacto, esto para que en caso de explosión por la maniobra se lograra aminorar el campo de impacto y daño.

Finalmente, el objeto fue asegurado y trasladado para su “desarme” en las instalaciones de los militares; sin embargo, el acceso al edificio fue restringido por más tiempo, en tanto que de nueva cuenta se hacía un recorrido más de reconocimiento.

Pasadas las cuatro de la tarde fue cuando, finalmente, solo a algunos empleados, se les permitió pasar por algunos objetos, en tanto que todas las actividades se reanudarán de manera normal este jueves.