Gaby Castillo, de Enamorándonos, metida en mafia de fraudes en Morelos y otros

La famosa gracias a TV Azteca, detenida por ser parte de  banda de su °°familia política°°

Gaby Castillo, de Enamorándonos, metida en mafia de fraudes en Morelos y otros

Participante en un exitoso reality show de TV Azteca, de nombre "Enamorándonos", donde adquirió grande fama, Gabriela Sánchez Castillo está hoy detenida en la Ciudad de México, como parte de una banda que comete fraudes en la compra de autos, principalmente en entidades como Morelos, Estado de México, Nuevo León y la capital del país. 

 

Mejor conocida como Gaby Castillo, cuya popularidad creció exponencialmente en el reality show referido -donde la explotación de su llamativa figura fue el principal motivo de su popularidad- la joven está presuntamente vinculada sentimentalmente a José Hareff Soto Jiménez, junto con quien fue detenida. 

 

La chica también es señalada por ser exnovia de Óscar Andrés Flores Ramírez, alias El Lunares, de La Unión Tepito. 

 

José Hareff y su familia son conocidos como la banda Soto Jiménez, y tienen ya un largo historial documentado en la comisión de fraudes en compra venta de autos e, incluso, de algunos inmuebles, según la información revelada por la Secretaría de Seguridad pública capitalina. 

 

El modus operandi de ese grupo es fundamentalmente a través de la expedición de cheque sin fondos, en la compra de vehículos costosos (se habla de que se dedican al tráfico de unidades irregulares que superan los 500 mil pesos de precio en el mercado). 

 

Según información oficial difundida por las autoridades judiciales de la Ciudad de México, dicha banda adquiere a vendedores de buena fe autos y camionetas de segmento alto, y paga con cheques que nunca se pueden cobrar, pues no hay fondos monetarios que respalden a tales documentos. 

 

Ese grupo presuntamente delinque de esa manera en Morelos y las entidades referidas. 

 

También, aparentemente, compra vehículos robados  (los cuales se expenden normalmente a precios irrisorios), a los que después se les fabrican documentos apócrifos, y sus números de serie son remarcados para poderlos comercializar a precio de mercado en las entidades señaladas. 

 

El pasado 3 de enero, Gabriela Castillo fue detenida en la CDMX. Según información de las propias autoridades capitalinas, que cumplimentaron la orden de aprehensión, la famosa mujer ofreció, junto con su novio, con quien fue capturada, medio millón de pesos a los agentes de investigación de aquella urbe, a fin de no ser puesta a disposición del Ministerio Público de esa entidad. Los funcionarios policiacos no cayeron en la tentación y procedieron conforme a derecho, se aseguró. 

 

Igualmente, trascendió que la joven que debe su fama a la televisora del Ajusco, intentó evitar su consignación al asegurar que no estaba relacionada con José Hareff,  sino que únicamente le brindaba un servicio profesional. 

 

Por lo pronto, ella ya está siendo procesada en la capital del país por sus vínculos con ese grupo delincuencial, y se mantiene privada de su libertad en el penal femenil de Santa Martha.