Como usual y anualmente pasa papelerías se vieron abarrotadas

Como usual y anualmente pasa  papelerías se vieron abarrotadas
Papelerías, tiendas de calzado y algunas de ropa donde se pueden encontrar uniformes de escuelas a bajo costo, se encuentran abarrotadas por padres de familia que buscan desesperadamente todos los implementos y artículos necesario para el regreso a clases.

Desde hace unos 5 días las papelerías, tiendas de calzado y algunas de ropa donde se pueden encontrar uniformes de escuelas a bajo costo, se encuentran abarrotadas por padres de familia que buscan desesperadamente todos los implementos y artículos necesario para el regreso a clases hoy lunes 29 de agosto. Los tutores hacen largas fila para poder adquirir lo necesario para que sus hijos regresen a las clases presenciales.

Luego de que la Secretaría de Educación Pública (SEP y el Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM) indicarán que en el presente ciclo escolar 2022-2023 las clases serán presenciales al 100 por ciento, los padres de familia se vieron en la necesidad de hacer compras al vapor de uniformes, calzado y los útiles escolares.

Para Camerino Román representante de una papelería, esperaban que en los días subsecuentes al inicio de clases empezaran los padres de familia a surtirse de los útiles escolares, pero no fue así “la verdad es que nos sorprendió que haya mucha demanda”. Manifestó que se espera que fuera después del primer inicio de regreso a los salones cuando los tutores empezaran a adquirir los útiles escolares.

Observó que en donde las ventas también se iban a incrementar era en el caso de las zapaterías y tiendas de ropa que expenden los uniformes escolares bajo precio, luego de que en los planteles escolares están muy caros. No fue así, y precisó que al final, todos los comerciantes de los diferentes rubros salen beneficiados con el regreso a las clases en las escuelas, porque sus ventas han subido por arriba del 50 ciento.

Además de los distribuidores de los productos mencionados, también los laboratorios clínicos y médicos públicos, lucieron abarrotados, debido a que los estudiantes acudieron a realizarse estudios médicos y obtener así el certificado de salud que es requerido para poder inscribirse en las escuelas.

También hubo padres de familia desesperados, porque no contaban con la economía suficientes para poder comprar lo necesario para sus hijos, debido a que es hasta el miércoles cuando se paga la quincena “ni modo muchos de nosotros tuvimos que andar pidiendo prestado para comprar lo que necesitan los hijos”, destacó Francisco Salazar, padre de familia.