Caricatura Política - Charla con el Prof. Alejandro Vique
En opinión de Sergio Dorado
Normalmente, esta columna denominada “Caricatura Política” centra su atención en el humor irónico acerca de la realidad política que dice gobernar nuestro bello estado de Morelos. Hoy, sin embargo, el gracejo ramplón da un giro hacia un tema que requiere sensatez, pues trata sobre la formación de los docentes del México que viene. Definitivamente, todos los mexicanos deseamos la mejor educación para nuestros descendientes, y por ello el tema toma dimensión de relevancia.
En una charla informal que tuvo lugar en la Dirección de la Escuela Particular Normal Superior “Benito Juárez”, que preside el Prof. Alejandro Vique, hablamos sobre los planes de formación docente del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Aun cuando en el panorama nacional se mencionan algunos cambios administrativos, como es el caso del pase automático de alumnos egresados de escuelas normales al sistema educativo, los detalles del cambio se desconocen aún.
Inferí de la charla con el Prof. Vique que todo modelo educativo usado en algún momento histórico de México tiene cosas buenas y malas a la vez, con lo cual concuerdo, pues incluso el modelo por competencias, si éstas se explican como habilidades de aprendizaje y adquisición útiles para la vida, el modelo tiene sus bondades. Y desde luego también sus lados ásperos, especialmente respecto a su origen empresarial que es severamente criticado por algunos actores educativos y sectores de opinión pública.
Todo hace suponer (y esta es opinión mía), que siendo el Neoliberalismo un modelo que el gobierno de López Obrador rehúye con el mínimo tufo de esta doctrina, el proyecto educativo de este gobierno tendrá rostro diferente y habrá de rechazar la posición ideológica actual con una propuesta nueva, que empieza a propagarse con el nombre de “Nueva Escuela Mexicana”, que por lo demás, también adolece de detallesexplicativos.
Por lo pronto, el asunto de la formación docente está en “stand by”, expresa el Prof. Edel Albarrán, quien coordina el área de inglés en la Normal “BenitoJuárez. Éste se unió a la charla invitado por el Prof. Vique, posiblemente porque éste sabía de mi perfil en la especialidad de inglés. Por eso, en la segunda parte de la plática, el tema varió hacia qué versión de inglés sería preferible en el contexto de México.
El Prof. Albarrán aseveró que actualmente hay ambas versiones de certificación: la británica y la norteamericana; por lo tanto, los usuarios de este idioma pueden optar por su preferencia personal. Desde luego que el Prof. Albarrán conoce el concepto de “plurilingüismo” del Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCER), que dentro del mercado neoliberal es pieza importante. En un mundo globalizado, y desde la visión plurilingüista, caben todas las lenguas, y por lo tanto ambas versiones, la británica y la norteamericana, se justifican.
Sin embargo, el modelo de enseñanza, aprendizaje y evaluación del MCER fue concebido para un contexto europeo, donde ir de un país a otro e interactuar en lenguas diversas es común. La realidad de México es otra, el prurilingüismo de nuestro país se reduce a las lenguas indígenas, que gradualmente y muy a pesar de sentimientos nostálgicos de la historia de México, van cediendo y desapareciendo del mapa global lingüístico. Desde luego que hay una minoría mexicana que domina el idioma inglés a la par de los hablantes nativos, pero la gran masa de alumnos, por otra parte, sufre con el modelo del MCER adoptado por SEP sin adaptaciones.
El panorama parece indicar que las expectativas fueron altas para la realidad de aprendizaje masivo de hoy.
Cuando me despedí de ellos, agradeciendo su atención y la invitación de un café matutino colaborador con el ánimo y el ambiente ameno de la charla, encontré a los alumnos en receso. Unos jugaban futbol mientras otros compraban algún bocadillo en la cafetería; otros más simplemente charlaban entre ellos o aprovechaban el tiempo para entrar en los sanitarios. Todo esto vi desde la parte alta de las instalaciones, que es donde se ubica la oficina del Prof. Alejandro Vique, y no hubo más remedio que bajar al área de aulas, donde me dominó la nostalgia.
Yo mismo soy egresado de esta escuela, y de eso ya llovió, pero el recuerdo queda y camina hacia atrás con sigilo. Ahí me volví a ver con mi amigo Gustavo Galicia en la clase de Fonética, impartida por la maestra Poupard, o estudiando teorías de aprendizaje o echándonos una empanada en el receso. Ahí también, me vicompartiendo con los amigos Octavio Suárez Treviño, Martha Jacobo Hernández, Consuelo Zúñiga Ocampo, el “Robert” Dorantes y Juan Manuel Pérez Morán. Y así decenas de amigos que alguna vez convivimos en la Escuela Normal Superior “Benito Juárez”.
Buenos recuerdos entonces.
, cuando empezamos a escuchar el bullicio de los alumnos que en ese momento salían a un receso.