Bienvenidos compañeros y compañeras de capep a educación especial

En opinión de Rosario Ramos Cuevas

Bienvenidos compañeros y compañeras de capep a educación especial

ATP Zona Escolar No. 5

 

La educación especial en el Estado de Morelos está de fiesta, la semana pasada ocurrió algo que esperábamos desde hace varios años. Los Centros de Atención Psicopedagógica de Educación Preescolar (CAPEP) se integran, a partir del próximo ciclo escolar, a la modalidad de la educación básica denominada Educación Especial. Y ¿Por qué nos congratulamos?, ¿Qué representa que los CAPEP se integren de forma total a la atención que brinda la educación especial?, es la oportunidad de que por primera vez en el Estado de Morelos la atención de los alumnos que enfrentan barreras para el aprendizaje y la participación por presentar discapacidad, problemas severos de aprendizaje, de comunicación, conducta o aptitudes sobresalientes reciban una atención articulada a lo largo de su trayecto educativo por los tres niveles de educación básica. Representa la oportunidad de que los alumnos y alumnas sean vistos y sus situaciones sean comprendidas desde una misma óptica; el modelo de atención de educación especial en el estado considera un enfoque integral del desarrollo, una atención ecológica y funcional y sobre todo retoma la importancia de los contextos en los que se desenvuelven los alumnos, todo con el fin de comprender la situación actual que enfrentan los niños en sus contextos escolares. Las y los compañeros que trabajan en CAPEP llegan para enriquecer y fortalecer al departamento de educación especial con todos sus saberes y experiencias acumuladas en el ámbito de la educación preescolar, la cual representa el primer encuentro formal de los pequeños con la educación, con un aula, con un horario estricto, con una persona extraña a la que por primera vez llamarán “maestra”. ¿Qué sería de ellos si no encontraran un aula repleta de hermosas y reconfortantes imágenes, dibujos, recortes y fotografías que les hacen comprender que ir a la escuela no es tan atemorizante como parece?, ¿Qué sería de ellos si no descubrieran que ir a la escuela es ir a aprender jugando y haciendo miles de actividades divertidas que mi maestra planea, tan meticulosa pero sobre todo creativa y amorosamente?, ¿Qué sería de ellos si no supieran que durante cerca de 3 horas y en ausencia de mamá, tienen a una maestra que los escucha cuando se sienten tristes, que los abraza cuando lo necesitan, que les canta y los hace reír casi tanto como lo hace mamá?. El personal de CAPEP durante décadas ha decorado aulas, ha planeado actividades y se ha entregado a la educación preescolar con una estrella más en la frente, la educación preescolar de pequeñas y pequeños que por diferentes causas han enfrentado barreras en sus primeros encuentros con la educación. Durante años CAPEP ha acogido a todos estos pequeños y con ello, el personal que ahí labora, ha ido incrementando saberes, habilidades y experiencias en el terreno de lo que ahora llamamos ajustes razonables y diseño universal. Imaginemos la envergadura de la labor, lograr que una niña o niño con discapacidad diga sus primeras palabras, forme sus primeras frases, haga sus primeras “carreritas”, aprenda sus primeras rondas, haga sus primeros amigos. Todo esto se logra con base en sólidas competencias docentes pero también gracias a una actitud humana, empática, de valoración y respeto a la diversidad que prima en ellos y lo transmiten a padres de familia y sociedad.

En estos tiempos en los que la inclusión educativa es un principio filosófico básico de la educación en México, se hace necesario sumar esfuerzos, sumar voluntades, sumar experiencias por el bien de los alumnos más vulnerables. 

La inclusión es un concepto que hoy en día anda en boca de todos, en los discursos políticos, sociales y por supuesto en los educativos. Sin embargo para garantizar la inclusión educativa, la cual en realidad es más un fenómeno social más que eminentemente educativo, es necesario garantizar que los alumnos que pertenecen a uno de los grupos más vulnerables, es decir, los niños y niñas con discapacidad reciban los apoyos específicos que requieren para poder alcanzar los aprendizajes. Y es en esta labor en la que la incorporación de los CAPEP será una herramienta fundamental para el logro del propósito.

Ven cómo es fácil sentirse de plácemes, el departamento de educación especial no puede más que sentirse feliz y completo. Bienvenida la experiencia de CAPEP, bienvenida la creatividad de CAPEP, bienvenidos los valores de CAPEP, bienvenidos todos y cada uno de las compañeras y compañeros que escribieron una página más de la educación especial.