Un grupo de choque reventó la asamblea de Morena en Cuautla
Cuautla, Mor.- Un grupo de choque, que esperó pacientemente que se iniciara el proceso de registro de los militantes del Partido del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), reventó la asamblea cuando apenas había poco más de 500 personas, que eran buscada en un padrón, que fue “rasurado”, porque extrañamente a pesar de llevar el código QR, y la certificación como integrante, no aparecía en los listados.
Desde ahí se empezaron a dar los primeros problemas, eran aproximadamente las 10:45, todavía el mayor número de contingente era “acarreado” en diversas unidades del transporte colectivo, principalmente Urvan, y no alcanzaba a llegar.
A pesar de que la calle donde se ubica el Salón “Embajador”, ubicado en la colonia Plan de Ayala, era resguardado por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, además de que su cuartel general se encuentra a unos pasos, un grupo aproximado de 100 personas, llegaron y empezaron a violentar el proceso, “o entremos todos y participamos o se acaba la reunión”, gritaron.
Entre empujones, lograron sobreponerse a un reducido grupo de seguridad de Morena, quienes tuvieron que ceder ante los esquiroles, que luego de haber logrado su objetivo, simplemente se fueron, “desaparecieron” así como llegaron; su objetivo, fue notorio, era reventar la asamblea, y al lograrlo, ya no tenían nada que hacer en las instalación del Salón “Embajador”, y desalojaron, así como llegaron, el inmueble.
Mientras, adentro del lugar, acondicionado para que se realizará la asamblea, todo era caos, al igual que afuera. Unos gritaban que la “asamblea no se reventaba, vamos a seguir; no por unos cuantos se va a suspender la reunión”. Ya no pudieron hacer nada, el objetivo de los provocadores dio resultado, rompieron el esquema y se fueron tranquilamente, ante la complacencia de unos policías, que ni por enterados se dieron.
Antes de que se iniciara el proceso, Edith Margarita Soriano García, consejera nacional de Morena, dijo, en torno a las protestas de parte de algunos militantes, que era necesaria la identificación y el código QR, del cual ella enseñó el suyo propio. Ni el código fue respetado, porque hubo gente que no aparecía en un “rasurado” padrón, donde los listados, no se sabía quién lo entregó o cómo fueron hechos.
Hasta la recién galardonada con la presea “Xochiquetzal”, Paola Cruz Torres se encontraba en las inmediaciones del inmueble, en esperar de poder registrarse para entrar al interior del salón. Ella refirió que solo podían participar los militantes registrados hasta el mes de noviembre de 2017, tal y como había sido el acuerdo nacional de Morena.
Al final, el grupo de choque, que según algunas fuentes consultadas, fueron enviados por dos grupos de militantes morenistas, que esperaron pacientemente, llegaron, reventaron la asamblea, y se fueron tranquilamente, tras haber logrado su objetivo, así de sencillo y de simple.