TIEMPO DE LOS TRABAJADORES

En opinión de Juan Salgado Britov

TIEMPO DE LOS TRABAJADORES

Hoy se conmemora el Día del Trabajo y como cada año el 1º de mayo es oportunidad para que trabajadoras y trabajadores se movilicen, desfilen, se manifiesten y expresen demandas, consignas y protestas; aun cuando el artículo 123 constitucional y la Ley Federal del Trabajo han sido objeto de múltiples reformas siempre para favorecer a la clase trabajadora, existen muchos pendientes para hacer justicia cabal  sobre todo a las mujeres que laboran y que siguen enfrentando inequidad, desigualdades, violencia de género y muchas formas de discriminación que tanto los gobiernos como sociedad deben combatir y superar.

El día del trabajo es también oportunidad para reflexionar y recapitular sobre los grandes retos que como país, Estado y población tenemos que asumir de cara al deber ineludible de todos para generar las mejores condiciones para el crecimiento económico y el desarrollo social donde empresarios, trabajadores y gobierno son los protagonistas centrales para alcanzar las metas donde la calidad, la productividad y la competitividad son fundamentales lo mismo en la producción de bienes que en la prestación de servicios. Estoy convencido que el gobierno actual ha dado fiel testimonio de su compromiso y solidaridad con el sector laboral; por ejemplo el salario mínimo se ha incrementado como nunca antes y las pensiones dignas  hoy están garantizadas para la tranquilidad y estabilidad de las familias, igualmente las políticas públicas y reformas legales que se han emprendido tanto en trabajo como seguridad social, vivienda y muchos temas más hacen ver y reconocer que hoy las y los trabajadores han recibido apoyos sin precedentes lo que hace evidente que es tiempo de los trabajadores.

Para quienes en las fábricas, oficinas, hogares, en el campo o prestando todo tipo de servicios laboran ya sea como asalariados y no asalariados, éste día del trabajo vaya nuestro reconocimiento y solidaridad para que sus esfuerzos sean siempre debidamente reconocidos y remunerados tanto en lo económico como en lo social, garantizándoles justicia, seguridad y bienestar.