Quién soy y por qué soy activista
En opinión de Cristina Isabel Domínguez Reyna
Soy Criss, tengo 30 años, soy Licenciada en Psicología por la UAEM, activista social y he sido Modelo para marcas de ropa mexicana.
He tenido la grandiosa oportunidad de participar en distintas organizaciones en pro de las personas con discapacidad y sus derechos. He logrado que mi voz sea escuchada en la tribuna del Congreso del Estado, donde presenté propuestas encaminadas al respeto a nuestros derechos, así como a la inclusión social, laboral y educativa; tanto ahí como en diversos espacios y foros ciudadanos, he dado pláticas y conferencias con diferentes temáticas de sensibilización, enfocadas a la discapacidad.
Con mis acciones, he tratado de deconstruir el término discapacidad, saliendo de lo esperado, porque quito el 'dis' y solo veo 'capacidad', buscando cambiar también el cómo lo ve la sociedad. Creo firmemente que no deberíamos hablar de una integración, sino, de una inclusión de las personas con discapacidad; en este “andar” ha surgido en mí una gran pregunta: ¿Por qué tenemos que incluir a seres humanos, siendo todos seres humanos? Es decir, comprendo que una discapacidad es una condición de vida que te “obliga” de cierta manera a realizar actividades cotidianas de diferente forma y enfrentamos diferentes barreras, ya sean en la vida social y en la vida escolar, pero, considero que, no es menester el poner un nombre a este grupo, basta solamente con ser equitativos y justos con lo que cada quien requiere, pues cada persona tiene su “particularidad”, con habilidades, debilidades y hasta gustos diferentes.
Considero que los términos utilizados no tienen el objetivo de segregar, solo buscan nombrar y entender la discapacidad, pero al ser utilizados de manera indiscriminada terminan segregando y excluyendo. Si todos dejáramos de tratar de entender y empezáramos a informarnos y acercarnos a gente que vive con esta condición de vida, todo sería más sencillo. Esto no solo tendría que aplicarse a personas con discapacidad, también a los demás grupos considerados como “vulnerables”.
No soy extraordinaria, pues todos lo son a su manera, solo quiero oportunidades, que todos seamos tratados como seres humanos y no como “estos y aquellos”, sino como un “nosotros”. Eso sería para mí, una sociedad armónica y espero que cada vez seamos más las personas que pensemos de esta manera, ésta es la motivación que me mueve a ser una activista.