Lanzan alerta por el aumento de casos de bullying escolar
Han aumentado en las escuelas de Cuernavaca
Los casos de bullying han aumentado en las escuelas de Cuernavaca, indicó Mauricio Miranda Villalba, presidente de la Asociación de Padres de Familia.
El presidente de la asociación, señaló que han solicitado a las autoridades educativas, implementar programas y proyectos, donde involucre a los niños y padres de familia, que coadyuven a disminuir los casos
En entrevista dijo que desafortunadamente, se ha normalizado la violencia en el estado, un factor que influye psicológicamente en niñas, niños y adolescentes de los planteles educativos.
El bullying o acoso escolar es una conducta que se sigue presentando en las escuelas de la capital, lo cual, representa una persecución física o psicológica que realiza un estudiante contra otro de forma negativa, constante e intencionada.
“En el estado se ha normalizado la cuestión de la delincuencia, y todo el mundo habla y participa en ella conscientemente o inconscientemente, por lo que es un tema muy preocupante”, expresó el presidente de la Asociación.
Otro factor que influye para que los casos de bullying vayan al alza, es que no se presta la atención debida y por ende, no se abordan para identificar la raíz de dicha violencia, y así poder entender el origen del conflicto.
Se requiere establecer criterios, para accionar estrategias a una pronta solución dentro de las escuelas y guiar a los alumnos reforzando valores, de tal modo que, puedan diferenciar de lo que es bueno y de lo que es malo.
Mauricio Miranda, exhorta de manera personal, a las autoridades educativas, en especial al Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), para que exista una escuela mexicana libre de violencia, ya que, el acoso escolar, tiene efectos negativos en la salud física, el bienestar emocional y el rendimiento académico de los niños.
Es importante identificar y atender a los niños que violentan a sus demás compañeros y los alumnos víctimas del bullying, puesto que, estamos sumergidos en una sociedad donde no se puede controlar lo que las niñas, niños y adolescentes viven, observan y escuchan dentro de sus hogares y fuera de la escuela.