Destaca entrenador apoyo otorgado a morelense destacado en bádminton
El joven morelense Emiliano Carrera continúa consolidando su desarrollo deportivo con el respaldo del Gobierno estatal, a través del Instituto del Deporte y Cultura Física del Estado de Morelos (Indem), mismo que hoy le permite formar parte de la selección juvenil de bádminton que entrena en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR).
Antonio Carrera Corona, presidente de la Asociación de Bádminton, destacó que detrás del crecimiento de Emiliano existe un trabajo constante basado en el esfuerzo y sacrificio, valores que distinguen a los deportistas de alto rendimiento: “Como siempre, es trabajo, es esfuerzo, es sacrificio de todos los deportistas, pero también es la alegría de poder practicar el deporte”, expresó.
El dirigente recordó que Emiliano inició su etapa formativa en el ámbito estatal dentro de Morelos, donde superó su proceso clasificatorio y logró la medalla de oro en la Olimpiada Nacional, resultado que marcó el inicio de su proyección internacional. A partir de ahí, el atleta se integró a un proceso rumbo a competencias de alto nivel, incluyendo eventos internacionales con miras a los Juegos Olímpicos de la Juventud.
Durante este camino, Emiliano participó en torneos internacionales como el de Colombia, donde obtuvo el primer lugar; además de competir en Costa Rica; así como en el Panamericano celebrado en Guatemala, donde se colocó dentro de los primeros ocho mejores del continente. Actualmente, el atleta se encuentra concentrado en el CNAR, fortaleciendo su preparación técnica y competitiva.
Para el cierre del año, se tiene contemplada su participación en el torneo de Guanajuato, mientras que en diciembre dará inicio un nuevo ciclo competitivo con el estatal, seguido de los clasificatorios programados para el próximo año, con el objetivo de volver a destacar en la Olimpiada Nacional.
Antonio Carrera señaló que el acercamiento al bádminton nació gracias al apoyo de personas cercanas, lo que permitió que Emiliano encontrara en este deporte una vocación que hoy se refleja en logros y oportunidades a nivel internacional, reafirmando la importancia del acompañamiento y el impulso oportuno en la trayectoria de los jóvenes talentos deportivos.
El bádminton en México ha experimentado un crecimiento notable durante los últimos años. A pesar de que tradicionalmente el fútbol o el boxeo han dominado el panorama deportivo nacional, este deporte de raqueta ha ido ganando terreno de forma constante, atrayendo a nuevos entusiastas y atletas.
Este impulso se debe, en gran medida, a los esfuerzos concertados de las federaciones y asociaciones locales por promover la disciplina más allá de los círculos habituales, organizando torneos y clínicas.
Inicialmente visto como una actividad recreativa, su percepción ha evolucionado significativamente. Los padres de familia y los jóvenes ahora reconocen el bádminton como una disciplina olímpica seria, lo que ha elevado su estatus y atractivo competitivo. La accesibilidad del equipo necesario, que no es excesivamente costoso comparado con otros deportes de élite, también ha facilitado una mayor adopción.
La participación juvenil es el motor principal detrás de esta expansión. Desde edades tempranas, los niños y adolescentes se están involucrando activamente, impulsados por programas escolares y la creación de academias especializadas. Estas iniciativas proporcionan una base sólida para el desarrollo de talento, asegurando una cantera de jugadores prometedores para el futuro cercano.
Un factor clave ha sido la creciente visibilidad de atletas mexicanos en competencias internacionales. Figuras como Lino Muñoz, quien representó a México en los Juegos Olímpicos de Río 2016, han servido de inspiración. Sus logros demuestran que es posible competir al más alto nivel, motivando a la próxima generación a perseguir metas ambiciosas dentro de este deporte.
Asimismo, la infraestructura dedicada al bádminton ha mejorado considerablemente. Ya no se limita a gimnasios improvisados; ahora existen instalaciones más adecuadas que cumplen con estándares profesionales, algo esencial para la práctica seria y el entrenamiento de alto rendimiento. Esto permite a los jugadores entrenar en condiciones óptimas.
En los estados de Jalisco, Nuevo León y Yucatán, la fiebre por el bádminton es particularmente palpable. Estas regiones lideran el número de practicantes y la organización de eventos, convirtiéndose en los epicentros del desarrollo deportivo en el país. El dinamismo en estas zonas impulsa el crecimiento a nivel nacional.
Programas específicos dirigidos a la iniciación deportiva han sido fundamentales para captar el interés de los más jóvenes. Mediante talleres lúdicos e introductorios, los organizadores logran que los niños se enganchen rápidamente con el dinamismo y la velocidad del juego. El enfoque en la diversión inicial ha demostrado ser una estrategia efectiva de retención.
La presencia de entrenadores certificados, tanto nacionales como extranjeros, es otro pilar del progreso. Su experiencia y conocimientos técnicos han elevado la calidad del entrenamiento disponible, permitiendo a los atletas mexicanos perfeccionar sus habilidades y estrategias de juego, cerrando la brecha con potencias mundiales.
Las redes sociales e internet han jugado un papel amplificador en este fenómeno. Plataformas digitales permiten una difusión rápida de torneos, resultados y contenido inspirador, creando una comunidad virtual activa que trasciende las fronteras geográficas dentro del país. La conectividad digital mantiene viva la pasión de los seguidores.
Además de los beneficios físicos evidentes, el bádminton fomenta valores importantes en los jóvenes, como la disciplina, el respeto por el oponente y la perseverancia. Es un deporte que requiere una gran concentración mental y rapidez de reflejos, habilidades que los atletas trasladan a otros aspectos de su vida diaria, mejorando su desarrollo integral.
La colaboración con federaciones internacionales ha facilitado intercambios deportivos y campamentos de entrenamiento. Estas oportunidades exponen a los jugadores mexicanos a diferentes estilos de juego y metodologías de entrenamiento, acelerando su curva de aprendizaje y desarrollo competitivo. Es un paso crucial hacia la élite mundial.
A pesar de los avances, persisten desafíos como la necesidad de mayor financiamiento y patrocinio para los atletas emergentes. Superar estas barreras económicas es vital para asegurar que el talento no se pierda por falta de apoyo, permitiendo a los deportistas dedicarse plenamente a su carrera.
La inversión privada sigue siendo un área de oportunidad.
Mirando hacia el futuro, la consolidación del bádminton en México dependerá de la capacidad de mantener este impulso y expandirse a más estados de la república. La meta es clara: establecer una tradición deportiva sólida y constante que produzca campeones olímpicos y mundiales, llevando la bandera mexicana a los podios más altos.
Redacción

