Funcionario confirma que alumnos ingresan a planteles con drogas

Funcionario confirma que alumnos ingresan a planteles con drogas
Alumnos ingresan con dosis de marihuana y cocaína para la venta de estas sustancias ilícitas dentro de las escuelas, principalmente en nivel secundaria, confirmó el jefe de sector número 1 en Educación Primaria del IEBEM, Basilides Nava Ariza.

Alumnos ingresan con dosis de marihuana y cocaína para la venta de estas sustancias ilícitas dentro de las escuelas, principalmente en nivel secundaria, confirmó el jefe de sector número 1 en Educación Primaria del Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), Basilides Nava Ariza.

 

En entrevista, el jefe de sector informó que, un exdirector de un plantel educativo en el municipio de Coatlán del Río, optó por dejar su cargo debido a que, “fue amenazado por el narco” al querer imponer la comercialización de la droga dentro de la institución educativa sin expulsar al alumno, ya que, temen a represalias o venganza en contra de la integridad física de los maestros.

 

A pesar de ser una situación de alarma, expresó que, las autoridades educativas no denuncian estos casos donde los menores ingresan con estas sustancias ilícitas en dosis o por medio de dulces, y simplemente llaman a los padres de familia o tutores.  

 

Estas afirmaciones se contraponen a las declaraciones del director general del IEBEM, Leandro Vique Salazar, quien negó la presencia de sustancias ilegales al interior de las escuelas.

 

Aseguró que, los grupos delincuenciales buscan distribuir la marihuana y la cocaína dentro de las instituciones educativas, utilizando a los menores de edad para mover su mercancía.

 

Contrario a la versión del funcionario estatal del IEBEM, el jefe del sector Nava Ariza reveló que los estudiantes ingresan con drogas a las escuelas para su comercialización, cada vez con mayor presencia de estas sustancias en los planteles educativos. 

 

El funcionario explicó, que cuando se detectan casos de menores con sustancias ilícitas, ya sea en dosis o mezcladas con dulces, las autoridades escolares evitan presentar denuncias formales y se limitan a contactar a los padres de familia o tutores.