En Cuautla, la violencia estuvo muy cerca por falta de vacunas
A punto estuvieron de llegar a los golpes padres de familia y personal del hospital “Rafael Barba Ocampo” del Instituto de Seguridad Social y Servicios para los Trabajadores del Estado (ISSSTE), de Cuautla, por la falta de información de parte de las Brigadas Correcaminos y vacunas anti covid para los niños de 5 a 11 años de edad. Ayer, de nueva cuenta los padres de familia hicieron largas filas desde temprana hora en espera de que sus vástagos pudieran ser inoculados.
Por esa falta de comunicación los mentores empezaron a arremolinarse en la puerta de entrada del hospital “Rafael Barba Ocampo”, debido a que de última hora les dieron a conocer que las vacunas anti covid para los menores de 5 a 11 años se habían agotado. Una mujer que llevaba un conjunto de color amarillo e integrante de las Brigadas, fue la que más caldeó los ánimos, debido a que todavía dijo que había al menos 15 vacunas lo que hizo que la gente se amontonara.
Misma situación se vivió en el caso del hospital de zona de Medicina Familiar número 7 del IMSS, en donde también se registró una larga fila de padres de familia que llevaron a sus hijos para que fueran vacunados contra el covid-19. Los tutores no quedaron conformes con la situación que se presentó en el segundo día, luego de que fueron pocas las vacunas que se aplicaron sin que les dieran información al respecto.
Consideraron que fue una falta de respeto de parte de las Brigadas Correcaminos, desde el primer día de vacunación, porque desde el principio debieron de haber dicho que solo había cierto número de inmunológicos para aplicar a los menores de edad. “Aquí estamos formados, con los niños, que están cansados de estar formados como nosotros, son niños y ellos buscan divertirse o compartir en la escuela con sus compañeros”, refirió Rosario Castellanos de Melgar.
Miguel Moreno Castrejón otro padre de familia que estuvo formado durante más de 3 horas para que al final les dijeran que sería hasta la próxima semana cuando se volvería a iniciar a vacunar a los menores de 5 a 11 años, precisó que para eso se supone que hubo preregistro. “De qué sirve que nos pidieran que nos registráramos si al final no iban ni a respetar ni tampoco a dar información sobre el número de vacunas con las que se contaba”, detalló.
Los padres de familia tuvieron que regresarse molestos y enojados por la falta de información de parte de quienes son los encargados de que se realice la vacunación de los niños; “no entienden que son niños, que tienen miedo y luego dicen que ya no hay vacunas”.