Concepto Social de Discapacidad - Plan Institucional de Desarrollo Educativo, PIDE 2024-2030: UAEM

En opinión de Eliseo Guajardo Ramos

Concepto Social de Discapacidad - Plan Institucional de Desarrollo Educativo, PIDE 2024-2030: UAEM

El Plan Institucional de Desarrollo Educativo (PIDE), 2024-2030, de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), está en construcción en todos sus temas. Una innovación ahora es escuchar voces externas que pudieran indicar aspectos relevantes para la universidad. En la Línea “Igualdad, Inclusión y no Discriminación” se encuentra el tema de la Educación Inclusiva para las Personas con Discapacidad. La directora de la Unidad para la Inclusión Educativa y Atención a la Diversidad e Interculturalidad, la Mtra. Maira Vianey Huerta de la O invitó al Mtro. Servando Gutiérrez Ramírez, Coordinador General de la Red Nacional de Educación Superior por la Inclusión (RENADESI) de la ANUIES, quien es Profesor Investigador de Tiempo Completo de la UAM-Iztapalapa y a un servidor, como Director Ejecutivo del Mecanismo Independente de Monitoreo Nacional de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de la CNDH.

A 10 años de establecida la Educación Inclusión Educativa en la UAEM para que se admitan, permanezcan y egresen con éxito adolescentes y jóvenes con discapacidad de Estado y, en ocasiones Estados cercanos. Como es sabido, la admisión a través del examen CENEVAL, se realiza con Ajustes Razonables y Ayudas Técnicas a los aspirantes con todas las discapacidades, sin excepción. El mismo día del examen, son citados a un edificio con infraestructura física accesible, con Intérpretes de Lengua de Señas Mexicana, con lectores individuales de las preguntas y escribanos de respuesta para personas con ceguera y baja visión o personas con discapacidad motriz en sus miembros superiores, también, asistentes que recomiendan a los jóvenes con discapacidad intelectual o con autismo, que no se estanquen con la misma pregunta que no pueden responder, etcétera. Lo mismo ocurre con la calificación de las respuestas, hay ponderaciones previstas en el Reglamento General de Admisión, Revalidación y Equivalencia de la UAEM. Existe el plan de realizar un examen con las acomodaciones suficientes para que dicho examen sea universal sin desventaja para los adolescentes y jóvenes con discapacidad. Es de una metodología sofisticada pero posible. Pero más complicado aún que se pudiera realizar bajo el convenio de CENEVAL por ser para todas las Universidades, que si fuera solo para la UAEM.

La Unidad ha desarrollado una metodología de seguimiento y acompañamiento para la permanencia, desde unas fichas que van registrando su trayectoria académica y gestionando los momentos de riesgo en vinculación con la Dirección General de Servicios Escolares de la Universidad. Con reuniones colegiadas con el colectivo de docentes que tienen alumnos con discapacidad y sus familias. Resolver la variabilidad de las prácticas profesionales en instituciones exteriores y empresas. Así como asesorarlos en lo que son los requisitos de egreso, como es el dominio en nivel dos de una lengua extranjera. Etcétera.

Solo resolver que en todas las clases presenciales o virtuales los alumnos sordos cuenten con un intérprete de Lengua de Señas Mexicana proporcionado por la propia universidad es toda una hazaña para acertar en todas las combinaciones posibles de tiempos y movimientos de los mapas curriculares.

Al solo enunciar los aspectos anteriores, podemos indicar que la UAEM es una de las universidades punteras en materia de Inclusión Educativa entre las Instituciones de Educación Superior, particularmente, entre las autónomas del país.

En este contexto, la exposición del Plan Maestro de la RENADESI viene muy oportunamente al evento del PIDE para poder enriquecer su perspectiva de discapacidad y de inclusión.

Por otra parte, el INEGI acaba de publicar los resultados de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2023, misma que sirve para actualizar los datos desde el último Censo de 2020; 3.5 millones de mexicanos se sumaron a la población (pasamos de 126 a 129.5 millones de habitantes); 1,3 millones de personas con discapacidad se sumaron (se pasó de 20.8 a 22.1 millones de personas); en los rangos de edad donde más aumentó el porcentaje de PcD fue entre los 30 y 59 años.

Pero el INEGI ha emitido los Lineamientos para captar, integrar y presentar información de población con discapacidad en Programas de Información del Sistema Nacional de Información Estadística y Geográfica. Para que todas las instituciones que tienen que ver con personas con discapacidad registren en sus formatos administrativos datos personales de estas personas. Para que no solamente sepamos cuántos son, sino quienes son y dónde están. La sugerencia es que la UAEM, en su estrategia de discapacidad, transversalidad e interseccionalidad, tomen en cuenta estos Lineamientos de registro administrativos. Se refiere a que además del nombre, edad, sexo, domicilio, CURP, INE, Clave del Certificado de Discapacidad de la Secretaría de Salud-DIF. Este Registro lo concentrará el INEGI y las instituciones que capten, integren esta información en sus estructuras administrativas deberán reportarlo al propio INEGI. Que es caso de la UAEM. Tiene información la Unidad para la Inclusión, los tiene la Dirección General de Servicios Escolares y los tiene la Secretaría Técnica de la Secretaría General que emite las credenciales de Discapacidad para los jóvenes con discapacidad que lo solicite. Esta credencial es voluntaria para los fines que convengan a los usuarios. Esto mismo ocurre con las credenciales que emite el DIF con diagnósticos del IMSS, del ISSSTE o de algún médico particular. Estos registros obligan a las instancias públicas, no a las particulares.

Ante esta variabilidad de instancias que emiten constancias de discapacidad paulatinamente se irá diluyendo ante el Certificado Único Digital de la NOM 039 SSA 2023. Que la Secretaría de Salud será responsable y que es producto de una evaluación alineada a la Clasificación Internacional del Funcionamiento corporal de la Organización Mundial de la Salud (CIF-OMS. ONU). El diseño de esta evaluación fue de múltiples entidades públicas de forma transversal, de ONG reconocidas de y pro-Personas con Discapacidad y de la CNDH. Que llevó poco más de tres años con profundas a amplias discusiones para coincidir en los diferentes criterios. Esta evaluación cuenta con una versión mexicana del WHODAS 2.0 de la CIF, concretadas en CAPIA (Cuestionario de Actividad para la Infancia y la Adolescencia). Se evaluarán a niños, adolescentes, jóvenes, adultos y tercera edad con discapacidad. En el caso de los niños, desde recién nacidos se evaluarán al bebé y a la madre en dupla que es la condición de cualquier recién nacido. Para ello, se entrevistó un amplio grupo de madres para que participaran en este diseño. El puntaje de esta evaluación es el siguiente:

                                                 Componentes de la ponderación de Discapacidad

                                                         Funciones y estructuras corporales:        40%

                                                                            Actividad de participación:         40%

                                                                                     Factores Ambientales:          20%

                                                                                        Factores Personales:             0%

                                                                                                                         Total:        100%

 

Los Factores Personales no tienen puntaje porque es una apreciación cualitativa. Este enfoque tiene perspectiva de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, en el cual se indica que la discapacidad es dinámica y evoluciona con la participación y la inclusión, a la inversa de la exclusión, que se involuciona por la discriminación, la segregación y el aislamiento. Por ello, los resultados de esta evaluación son temporales. Se puede refrendar el Certificado Único Digital de Discapacidad, y pueden variar los resultados de la ponderación de discapacidad. Es comprensible, por ejemplo, que un estudiante con discapacidad que inicia sus estudios de licenciatura al terminar dicha licenciatura es muy probable que su discapacidad disminuya, dada su mayor participación en su entrono profesional y cotidiano. Quizás sus funciones corporales sigan inalteradas, por ejemplo, alguna ceguera, sordera, motricidades, etcétera. Los factores ambientales, también pueden variar ante cambios sociales de su entorno.

La evaluación, además, de diagnosticar, también señala las ayudas técnicas que se requieren, así como sus ajustes razonables. Como puede advertirse será una tarea monumental. Para el caso de los aspirantes y estudiantes con discapacidad que no cuenten con su Certificado de Discapacidad, la Unidad para la Inclusión les indicará dónde pueden obtenerlo, Pero, no es obligatorio dicho certificado, ya que es voluntario.

La Clave del Certificado estará registrado en la CURP de la Persona con Discapacidad. La CURP tendrá un subsistema para la Discapacidad.

La Subsecretaría que se ha hecho cargo del diseño de la evaluación en la Secretaría de Salud, consideran necesario para mantener en su evolución el criterio de la Convención para los Derechos de las Personas con Discapacidad, el acompañamiento teórico de los principios en el proceso dinámico de evolución que se haga necesario de la CNDH.

Habrá por lo menos un centro de evaluación SSADIF por cada entidad, pero se irán ampliando paulatinamente. En esta medida se irán diluyendo la variedad de constancias de discapacidad de forma paulatina hasta quedar el Certificado Único. No sería desdeñable que la UAEM pudiera ofrecer servicio de evaluación a la comunidad de discapacidad del Estado de Morelos. Y tener una base de datos para la investigación en el campo.

Otro de los aspectos que es importante tener en cuenta para el PIDE de la UAEM aparte de lo que ya se ha expuesto, son los formatos accesibles para los libros y material bibliográfico para su base de estudiantes de todas las discapacidades. Para ello, apoyarse en el Tratado de Marrackech: “TRATADO DE MARRAKECH PARA FACILITAR EL ACCESO A LAS OBRAS PUBLICADAS A LAS PERSONAS CIEGAS, CON DISCAPACIDAD VISUAL O CON OTRAS DIFICULTADES PARA ACCEDER AL TEXTO IMPRESO”. Firmado por nuestro país y publicado el 9 de septiembre de 2016. Es para que accedan a la lectura las personas con ceguera y baja visión, pero también a quienes por su discapacidad no tienen acceso a la lectura tradicional de las obras publicadas. Beneficia a toda la población con discapacidad, en estas circunstancias, dentro o fuera del ámbito escolar. La Biblioteca Nacional de México, ha tomado la estafeta de ser depositaria de las obras en formato accesible para esta población. Convirtiéndose en una Entidad Autorizada para reunir el gran catálogo de obras bajo este Tratado. Pero cualquier institución que reciba financiamiento público, puede convertirse en Entidad Autorizada. La UAEM es susceptible se ser Entidad Autorizada, siempre y cuando ofrezca sus servicios no sólo a sus estudiantes, sino a todo potencial lector con discapacidad en el Estado. Sería un programa que el PIDE le encargue a la Biblioteca Central de la UAEM.

Quienes impulsan el Tratado de Marrackech en México desde hace algunos años es un grupo de investigadores de la UNAM, como es la Mtra. Camerina Ahideé Robles Cuéllar y Alicia Angélica López Campos. Coordinación de Atención a Personas con Discapacidad de la Facultad de Filosofía y Letras (CADFILOS), que, por cierto, forman parte del equipo asesor del Mtro. Servando Gutiérrez Ramírez Coordinador de la RENDESI de la ANUIES. En este grupo promotor, está desde hace algunos años el Mtro. Germán Bautista Hernández, Visitador Adjunto del Mecanismo de Monitoreo de la Convención de la CNDH. En este grupo hay otras instituciones más. De hecho, en el mes de abril Convocaron a su 6to Foro del Derecho a Leer, en la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen, en Jalapa Veracruz.

El compromiso es que los beneficiarios sean las Personas con Discapacidad y se asegure que así sea. Para que no se desvirtúe este beneficio para esta población. Ya que los Derechos de Autor no impedirán que se realcen estos formatos accesibles, siempre y cuando la obra no sea modificada. El problema con los Derechos de Autor vendría si algún usuario que no cuente con discapacidad haga uso gratuito de este recurso. Por ello, habría que tener las medidas suficientes para que no se desvíe el recurso. La UAEM, cuenta con la credencial de Discapacidad de sus estudiantes. Esta es una media que puede facilitar la selectividad de los usuarios. Pero esta medida puede reforzarse cada vez más con el Certificado único de Discapacidad, del que ya se ha hablado aquí. Hay que entender que si se forma una red de bibliotecas que accedan al mismo catálogo de obras en formatos accesibles, podrán hacer intercambios para no duplicar el esfuerzo de convertir las obras bibliográficas en formato accesible. El catálogo permitirá consultar si existe o no en este formato la obra de búsqueda.

Finalmente, nuestra sugerencia es que incluyan en el PIDE los Lineamientos del INEGI para recabar, integrar y almacenar información de las Personas con Discapacidad en la UAEM; que orienten a sus estudiantes con Discapacidad para que obtengan el Certificado Único Digital de Discapacidad de la NOM SSA 039 SSA 2023. Que fue publicado el 2 de febrero de 2024 y en los 200 días siguientes entrará en vigor, que será este próximo 20 de agosto de 2024; y adherirse al Tratado de Marrackech. Ojalá y el Consejo Universitario apruebe el próximo PIDE 2024-2030 con estos componentes. Avanzaría en su enfoque de Inclusión Educativa que lleva 10 años muy loables de vigencia.

 

¡Enhorabuena con el Concepto Social de la Discapacidad en el PIDE 2024-2030!

 

educacioninclusiva.egr@gmail.com