Caen ventas en mercados de Cuautla por la carestía
Jorge Rafael Sánchez 
Los incrementos en los precios de los productos de la canasta básica por arriba del 60 por ciento, amenaza al comercio formal, el cual ha visto desplomarse sus ventas considerablemente, lo que de continuar con esa tendencia, muy pronto no tendrán ni para pagar la operatividad de sus establecimiento. Los comerciantes tanto de los mercados municipales como los establecidos, corren el riesgo de colapsar porque al no haber ventas, no cuentan con el efectivo para hacer los pagos de impuestos, rentas, nómina y demás gastos que tienen que hacer.
Al respecto, Miguel Leana Vélez representante de los comerciantes del Centro Histórico de Cuautla, sostuvo que de acuerdo a los números oficiales, son aumentos del ocho por ciento; “pero si somos prácticos, en los números creo que todo raya en un 50 a 60 por ciento”, definitivamente no hay bolsillo que lo resista, sobre todo cuando se está atado a un salario mínimo.
Resaltó que según dicen los especialistas que en dos años se podrá ver piso parejo “y creo que difícilmente lo vamos a aguantar, porque cada vez que aumenta un producto, los comerciantes nos descapitalizamos y no tenemos el suficiente capital para seguir a la par; a eso hay que sumar que las autoridades locales no ayudan”.
Abundó que es por ello, que esta situación está afectando a los comerciantes cuyas ventas han caído hasta un 50 por ciento. Apuntó que la cifra que les han dado de manera oficial de que la inflación se encuentra por ahí del siete por ciento, está rebasada como por 4 veces por lo menos; la inflación que se vive anda entre un 50 y 60 por ciento”.
Por si fuera poco, además de la elevación de los precios por la inflación, las obras de remodelación del Centro Histórico les han frenado las ventas, al impedir que los consumidores lleguen a sus establecimientos, sin que el ayuntamiento de Cuautla tenga un plan de acción para prevenir una crisis mayor, pues hasta ahora no los han tomado en cuenta para conocer el calendario de obras a fin de programar el abasto de sus inventarios.
Dio a conocer que esta espiral de precios, está afectando a las familias de menos recursos económicos, pues cada vez es más difícil acceder a los productos básicos que están por las nubes y como consecuencia, las personas buscan lo más económico, pero la economía está totalmente colapsada. “Me acuerdo que hace poco todavía decíamos que aunque sea con un huevito con frijolitos la libramos, pero ahora el kilo de huevo está rondando más de 50 pesos; el frijol, ni se diga, lejos de que la gente pueda comprar lo de siempre, sólo compra lo elemental”.
