10 de Mayo con Perspectiva de Género
En opinión de Lorena Elizabeth Castillo

Dos razones de reflexión y crítica pueden y deben motivarnos en esta importante fecha, debido a la construcción social que llegó a ser, hasta hace unos años, la maternidad como sinónimo de sumisión y abnegación y, en segundo plano, la feminidad como atributo exclusivo del cuidado de la casa y educación de los hijos.
Por exagerado que pueda parecer, amplios sectores de la población masculina, incluso cierta cantidad de mujeres −números que sin duda van a la baja−, mantienen intactas ambas creencias. Claro, estas ideas patriarcales ya no se manifiestan abierta y socialmente como antaño, pero en el ámbito privado siguen patéticamente vigentes.
Revisemos a detalle los dos aspectos vinculados a la celebración del Día de la Madre en México. Como ya dijimos, la maternidad es una construcción social que se ha vinculado tradicionalmente con el rol femenino. El Día de la Madre se ha utilizado para reforzar estereotipos de género y perpetuar la idea de que las mujeres son las principales cuidadoras y responsables de la familia.
En el otro aspecto del 10 de Mayo, la violencia contra las mujeres es un problema grave en México, por lo que insistimos en que esta celebración debe ser una oportunidad para reflexionar sobre la necesidad de erradicar la violencia de género; según datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), en México, 7 de cada 10 mujeres han sufrido violencia en su vida.
El Día de la Madre es una celebración de vital importancia y una tradición muy arraigada en la cultura mexicana, por lo tanto, es fundamental aprovechar estas características para vincular este festejo con la perspectiva de género y la lucha por una vida libre de violencia para las mujeres.
De ahí la importancia de promocionar y difundir la perspectiva de género para entender la complejidad de la violencia contra las mujeres y la necesidad de abordar la raíz del problema. En el Día de la Madre, hombres y mujeres debemos reflexionar y actuar sobre la importancia de promover la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres.
Por último, pero no menos importante, mencionamos acciones para promover una vida libre de violencia para las mujeres, en esta fecha y en toda oportunidad durante el año. Por ejemplo, utilizar el Día de la Madre para concientizar sobre la violencia de género y la importancia de erradicarla.
Urge también fomentar la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en todos los ámbitos de la vida, así como brindar apoyo y recursos a quienes de ellas han sufrido violencia; crear un entorno seguro y de confianza, además de fomentar la reflexión y el diálogo sobre la violencia de género y la importancia de promover una vida libre de violencia.