Vivencias ciudadanas

Sin lugar a dudas, la pérdida importante en la semana que acaba de terminar es la muerte del último ícono artístico de Cuernavaca, el maestro Víctor Contreras, escultor, pintor y muchas cosas más, el artista que decidió vivir en Cuernavaca y desde aquí salió su obra al resto del mundo.

Su sed de sabiduría lo llevó a través de su vida a convivir con personajes tan importantes como Félix e Irina Yussupov y su maestro Olivier Picard, así como con embajadores, presidentes  y príncipes de todo el mundo, quienes desde que le conocieron vieron en él la extraordinaria inteligencia y sensibilidad que siempre lo caracterizo, esa mente ágil con un extraordinario sentido del humor del que disfrutamos todos sus amigos que aprendimos a quererlo y respetarlo.

Estar a su lado en una mesa era un verdadero placer siempre con la palabra inteligente y la broma con un mensaje profundo.

            De la misma manera, disfrutar de su obra es algo que nos sorprende por su profundidad y nos llena el espíritu. Así lo expresa el profesor Juveu Breuil, de la Universidad de la Sorbona de Paris: “la escultura de Víctor Manuel Contreras confirma que es una nueva forma sagrada del arte, una iconografía esotérica que requiere más de una hermenéutica de los símbolos que referirse a los criterios de las escuelas clásicas, modernas  y contemporáneas comunes y corrientes que podrían sugerir  algunos detalles de su obra”.

Por ello, señoras y señores, debemos de reconocer su inmensa maestría con la que nos muestra la sustancia espiritual de la mexicanidad en cada una de sus obras, donde el espíritu en la concepción artística es parte fundamental.

Víctor  decía al referirse a su gran obra la inmolación de Quetzalcóatl: la figura central simboliza la flama serpentina del fuego sagrado que todo lo trasforma y nada lo consume; siempre ascendente, nos da la idea de una serpiente, símbolo de la sabiduría  y de la tierra, que da origen al hombre como su creación suprema, y éste transformándose en ave que inicia el vuelo hacia el infinito, hasta convertirse en el planeta Venus.

Sus grandes obras están diseminadas por todo el mundo, donde recibió grandes premios como en Bélgica, Francia e Italia. Tuvo el reconocimiento de países como Rusia, Francia y, desde luego, de casi toda Europa y su adorado México.

Su grandeza de alma hizo que hace algunos meses nos regalara a los cuernavacenses, que ya contábamos con  la extraordinaria Paloma de la Paz y el Monumento a la Madre frente al Calvario, una imagen extraordinaria de Quetzalcóatl como el gran hijo de Chimalma, la princesa Tlahuica que, según la leyenda, dio a luz a este maravilloso personaje Ce Ácatl Topiltzin Quetzalcóatl en la Barranca de los Peces de Amatlán, Morelos, que ahora preside la entrada a una de las principales avenidas de la ciudad.

Cuernavaca era su vida y el lugar que él escogió para crear su obra. Lo despedimos como al último de los grandes. Por eso hoy, amigo, deseo que como la flama de Quetzalcóatl asciendas a la eternidad con el Padre, a descansar en paz junto a Tita, porque tu legado es imposible de borrar y un orgullo para los que te quisimos y a quienes nos permitiste disfrutar de tu afecto, tu arte e inteligencia. Buen viaje amigo.

En asunto aparte, los abusos de lo que llaman Seguridad Pública Municipal son verdaderamente increíbles, el pasado viernes a un padre de familia que circulaba en su vehículo con sus hijos a la una de la mañana, lo detuvieron horas para hacerle la prueba del alcoholímetro; como lo pasó, y no sabiendo como sacarle dinero, al padre de familia le pidieron la licencia y la tarjeta de circulación sin ningún motivo, pero al traer a sus hijos dormidos en la camioneta accedió. Por desgracia, se había equivocado y traía dos licencias de moto y no la de automovilista, y eso bastó para que lo bajaran de la camioneta a su nombre y lo dejaran en plena vía pública a buscar un taxi a esas horas de la madrugada para llevar a sus hijos a su casa.

El abuso de la autoridad con tal de cobrar, a sabiendas de que están violando la ley, es escandaloso. No sirven sus elementos para darnos lo que es su obligación, que es la prevención del delito; en contra de la Constitución, rebuznan diciendo que “si no quieren que les quiten las llantas a sus carros, no se estacionen en la vía pública”, como si las personas se estacionaran en la vía publica por gusto y no por necesidad; ya más pretextos de la policía chafa no podemos esperar. El abuso es en contra de los ciudadanos y estas actitudes convierten a las víctimas en enemigos del régimen. Y luego no quieren que Morena les gane las elecciones echándose enemigos irreconciliables cada fin de semana.

Y, para acabarla de amolar, la Guardia Nacional desaparece a las siete de la noche en la autopista México Cuernavaca, dejándole a los delincuentes vía libre para los asaltos, esta semana mataron a una joven de un balazo al tratar de asaltarla y, como colofón, la Seguridad Pública estatal -que tampoco sirve para nada- hace que los ciudadanos vivamos indefensos en manos de la delincuencia organizada. ¿No cree usted?