Serpientes y escaleras - La nueva jefa de policía

En medio de tantas malas noticias, una buena: una mujer estará al frente de la SSPC

La nueva jefa de policía

No fue fácil para el alcalde Antonio Villalobos acceder a la firma del convenio de Mando Coordinado de Policía; pasó más de un año y tuvo que ser ejecutado el jefe de la policía de Cuernavaca para que el edil entendiera la gravedad del problema y se sumara a un proyecto integral que, si bien no ha dado resultados, es el único camino definido por el estado para dar batalla a la delincuencia.

Habría que puntualizar que, aún sin la formalización del convenio de seguridad, el control de la policía en la capital ya estaba en manos del gobierno estatal; la firma del alcalde solo formalizó las cosas, aunque en el acuerdo con el estado se estableció que el secretario de seguridad en Cuernavaca sería designado a propuesta del alcalde. Aquí es donde las cosas se ponen interesantes.

La semana pasada Antonio Villalobos anticipó que el nuevo titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Cuernavaca (SSPC) sería una mujer; alguien capaz, incorruptible y experimentada en la materia, dijo el presidente municipal. El jefe del gobierno municipal no dijo el nombre, pero afirmó que la persona designada en el cargo caería muy bien a los ciudadanos.

El reto de mantener el orden en la ciudad y enfrentar a los grupos delictivos que operan en la zona metropolitana es enorme, sobre todo porque se tiene que actuar con las mismas herramientas de siempre y con una corporación que a todas luces está relacionada con la delincuencia. Ítem más: quienquiera que sea el jefe de la policía en cada uno de los municipios se tiene que ceñir a los lineamientos que establece la Comisión Estatal de Seguridad y a una estrategia que, ahí están los resultados, es absolutamente ineficaz.

A nadie le queda dudaque el plan de seguridad de la CES no ha servido y que los resultados del comisionado Ortiz Guarneros son terribles; ítem más: de un tiempo a la fecha no solo se habla de la mala estrategia, ahora (como en otros tiempos) se menciona que las cabezas de la policía estatal nuevamente estáncoludidas con la delincuencia organizada y que varios de sus integrantes tienen pacto con el crimen. Hoy a José Antonio Ortiz Guarneros no solo se le califica como un mal funcionario, también se le considera un protector de grupos delictivos. Pero regresemos a Cuernavaca.

Con esto como base es muy complicado suponer que la nueva jefa de la policía en Cuernavaca podrá cambiar las cosas, porque quien proteste como titular del cargo tendrá el aval del alcalde, pero no el apoyo del estado. Los secretarios de seguridad en los municipios enfrentan un doble y muy peligroso reto: luchar contra los grupos criminales que operan en sus regiones y resistir las acciones, los lineamientos y los intereses que les marcan desde la Comisión Estatal de Seguridad.

Lo ocurrido hace una semana en Cuautla es un claro ejemplo de ello: ahí vimos como el jefe de la policía municipal propuesto por el alcalde denunció una serie de acciones ilegales cometidas por altos mandos de la CES, documentó las cosas, tuvo como testigos a miembros de diversas corporaciones policiacas municipales y federales y al final enfrentó la embestida del gobierno del estado en un plano desigual porque, como lo dijo, “Ellos tienen el poder, tienen las bitácoras y tienen todos los elementos para cambiar las cosas y ponerlas según les convenga”. Más claro: los acusados son también losjueces y a ellos corresponde validar las acusaciones en su contra. No hay manera de que pierdan.

Ese es el contexto en el que se deben manejar todos los jefes policiacos en Morelos y las reglas de un juego en donde los bandidos ponen las reglas del juego, definen las estrategias, validan las acciones y califican los resultados. Es imposible que un municipio pueda dar la batalla por separado así porque, además, todos los instrumentos para combatir el crimen los tiene el estado y se manejan a través de una institución a la que hoy muchos consideran la raíz del problema.

Sería injusto decir que todos los policías son malos o tienen que ver con grupos criminales, basta recordar lo ocurrido hace unos días en Cuernavaca, cuando un elemento vial enfrentó a dos asaltantes y trágicamente perdió la vida en cumplimiento de su deber. Ahí está una muestra de que no todo está perdido, de que aún existen policías comprometidos con la sociedad y a pesar de todo hay una institución que desde varios puntos trata de salir adelante y sobreponerse a la torpe estrategia que los jefes han diseñado.

Por eso es importante la llegada de Alicia Vázquez Luna a la Secretaría de Seguridad Pública de Cuernavaca, porque se trata de una mujer valiente, incorruptible, que sabe de la materia y sobre todo conoce a la institución; que tienen raíces muy fuertes en el estado y una empatía ciudadana que no aparece por ningún lado en la legión veracruzana que llegó a Morelos de la mano del comisionado Guarneros.

El reto de la abogada es muy difícil, pero su capacidad la avala y lo que puede detonar su presencia y actitud en la policía capitalina debe ser observado con atención. Alicia conoce perfectamente a la policía de Morelos (estuvo al frente de ella hace algunos años), tiene un amplio conocimiento de las cosas que ocurren y sobre todo goza de la confianza de la tropa, que a lo largo de varios años no ha dejado de compartirle las cosas que ocurren dentro y fuera de la CES.

Vázquez Luna no llega a ciegas al cargo, ni tampoco es alguien ajeno a la sociedad; su trabajo profesional ha sido reconocido a lo largo de muchos años, su experiencia está fuera de dudas y su comportamiento público la convierte en la mejor opción para el cargo.

El reto que tiene Alicia es actuar con la misma congruencia de siempre, diseñar una buena estrategia y aplicarla con firmeza; pero sobre su llegada puede encauzar un movimiento dentro de la policía estatal que reviva el ánimo de la tropa, que mueva conciencias, que cambie el estatus quo der la CES, que recupere la confianza ciudadana y que sirva de ejemplo en otros municipios para mover en positivo a las corporaciones.

Alicia Vázquez Luna no solo será una buena secretaria de seguridad para Cuernavaca, también puede ser el ingrediente que hace falta para que las policías locales recuperen su dignidad, la confianza pública y comiencen a dar resultados. Dicho sea de paso: como secretaria de seguridad pública en Cuernavaca AliciaVázquez luce mucho mejor que el comisionado de seguridad Ortiz Guarnerosen Morelos.

-          posdata

Las expresiones de la secretaria de Cultura y Turismo del Estado a propósito del cierre de un bar en Cuernavaca son, por decir lo menos, desafortunadas. No es la primera vez que Margarita Saravia luce insensible ante este tipo de situaciones, ni tampoco la única en la que sus expresiones la colocan en el ojo del huracán.

No es el punto a discutir (como ella y ciertas personas lo expresaron) si la clientela del negocio en cuestión era local o su giro y asistentes no eran tan guapos y fifís como algunos quisieran; el punto es que se trata de un lugar que generaba empleos, que movía la economía local y formaba parte de la oferta turística del estado, tan deteriorada en los últimos años.

Dice la secretaria:

-          Este tipo de lugares dependen de las licencias y los permisos del municipio…

-          Nos interesa que la mayor parte de los establecimientos estén dando servicio, fundamentalmente los establecimientos turísticos, principalmente los que están en Rio Mayo…

-          Hay lugares que son más para la gente de Morelos que para los turistas…

-          El caso de este (La Patrona) era uno que daba servicio a los morelenses…

-          No son noticias, en el caso de La Patrona, que trasciendan mucho a lo que es nuestro turismo; el turismo que viene no está atento a este tipo de noticias, el turismo que viene de la Ciudad de México y otros estados de la república viene por el nivel de promoción turística que se lleva a cabo…

Los esfuerzos que hace el gobernador Cuauhtémoc Blanco para salir al paso de los diversos problemas que enfrenta su gobierno chocan con este tipo de declaraciones. Posturas como las de Saravia no solo representan un altísimo nivel de insensibilidad y torpeza del gobierno estatal, también hablan de una profunda incapacidad de aquellos que están al frente de las instituciones públicas.

La secretaria de Turismo de Morelos no tiene la formación profesional para ocupar dicho cargo y sus errores lastiman la imagen integral del gobierno de Morelos; su única experiencia en el ramo turístico se reduce a ser parte de la familia propietaria del balneario Las Estacas que, por cierto, es manejado de manera excelsa (ella, por cierto, no participa en las decisiones).

Según la óptica de Saravia en Morelos hay negocios de primera y de segunda, que importan y que no importan, que prestan servicio al turismo foráneo o que solo atienden a la clientela local. ¿Alguna vez, lectora lector querido, habías escuchado una expresión así de parte de un promotor turístico?

Un dato más: dice Margarita Saravia que el turismo que llega de la Ciudad de México y otros estados de la república vienen como consecuencia del “nivel de promoción turística de Morelos”. ¿Podría explicar la secretaria cuál es ese nivel de promoción turística y cuáles fueron exactamente las campañas de promoción turística que implementó su secretaría en el 2019 dentro y fuera del territorio morelense?

• nota

“Ya se los dije, hay 180 policías involucrados con el crimen organizado y que ya los tiene identificados el Comisionado”, dijo el gobernador Cuauhtémoc Blanco.

La mañana del martes, en una conferencia de prensa en las instalaciones del C5, el Vicealmirante confirmó lo que previamente dijo el Mandatario, añadiendo que la dependencia que encabeza no cuenta con los elementos suficiente para proceder penalmente contra los uniformados.

“Hay indicios que tenemos nosotros en la Comisión Estatal de Seguridad de que varios elementos de la policía, tanto municipal, como estatal, han estado dando protección a algunos grupos delictivos; sin tener la evidencia fehaciente que nos permita ponerlos a disposición de la autoridad competente.

“Es un trabajo de investigación que le presenté al señor Gobernador y le dije mi preocupación  de incrementar la matrícula en la materia para producir nuevos policías, dado la cantidad de policías que yo estoy viendo que están involucrados en actividades de protección a la delincuencia. Es necesario que aumentemos la matrícula en la Academia y para eso requiero mucho del apoyo del señor gobernador, por eso yo le hice esa presentación, ese trabajo que necesitamos ir renovando la policía”, dijo el comisionado Guarneros.

Dentro de esos 180 elementos señalados al interior de la corporación, están quienes no han aprobado los exámenes de control y confianza y los que no han podido ser cesados debido a que tramitaron amparos para evitarlo.

Tremenda cosa: 180 policías vinculados con la delincuencia organizada. ¿Y qué esperan para cesarlos?

-          post it

En unos días más el gobernador Cuauhtémoc Blanco rendirá (por ley) su primer informe de labres; en él el jefe del ejecutivo deberá detallar el estado que guarda la administración a su cargo en todas y cada una de las áreas que corresponden al poder ejecutivo.

Lo que plasme el mandatario y su equipo en este primer informe mostrará con datos duros lo que se ha hecho a lo largo de este primer tramo de gobierno. Todo lo que ahí se escriba será oficial, quedará en letra de molde y puede ser analizado por cualquiera.

Más allá del mensaje político, será importante revisar a detalle lo que documenta el gobierno en ese primer informe. El manejo de la opinión pública en este primer informe es clave para los siguientes años del actual gobierno.

-          redes sociales

Nos lo dicen una y otra vez: en materia de seguridad vamos bien, porque otros estados están peor.

El 2019 se cometieron 1 mil 573 asesinatos en Morelos, más que nunca en toda la historia del estado; en 19 días del 2020 vamos 41 homicidios dolosos y con ello nos colocamos, según Presidencia de la República, como una de las entidades más violentas de méxico en este arranque de año.

Felicitemos al comisionado Guarneros. ¡Vamos requetebien!

Comentarios para una columna sonriente:

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