Punto kairo - ¿Narco manta en las escuelas?
En opinión de Juan Salvador Nambo
La convivencia escolar es una forma de gestionar la violencia escolar. En las escuelas hay formas de violencia que están relacionadas con el clasismo, racismo, sexismo y otras expresiones que han sido motivo de atención por parte de los agentes escolares. En este sentido, el Programa Nacional de Convivencia Escolar (PNCE) se ha convertido en una herramienta para dicha gestión y se ha convertido en un referente importante para quienes han sido afectados por la violencia en las escuelas.
La pandemia vino a dibujar, para quienes tuvimos que estar frente a grupo durante los más de dos años que duró esta situación sanitaria, algo extraño relacionado con una ilusoria realidad de igualdad, de armonía, de empatía, de ganas de trabajar.
Con todo el esfuerzo que implicó estar atrás de una pantalla, los estudiantes sabían que debían entregar sus evidencias de trabajo ¿Y ahora? Nos vemos todos los días desde hace un par de meses y ellos parecen inmutarse. Quizá con justa razón.
El regreso a las aulas no es lo que se esperaba en este nuevo proyecto educativo. Considerando que el alumnado viene de una convivencia más apegada a la familia que a sus compañeros que en el inicio de la pandemia dejaron de frecuentar, tornándose un poco de indiferencia entre ellos solo por el hecho de querer acercarse y tenerlo prohibido, la apatía que se genera en estos encuentros puede llegar a que resurja un tipo de violencia dentro de las instituciones, no solo entre los alumnos sino también entre los docentes, ya que de cierta manera estos dos años se acostumbró a la o convivencia indirecta con ellos y formándose hábitos de tolerancia cero.
El Programa Nacional de Convivencia Escolar (PNCE) fue diseñado para intervenir en los problemas de acoso escolar, cosa que hasta la fecha ha sido rebasado ya que no se ha visto o escuchado que hayan disminuido dentro de las instituciones educativas, principalmente en las zonas urbanas de la ciudad, como se han visto en algunas escuelas las “narcomantas” en las que debería llamar la atención de nuestras autoridades haciendo de esta una investigación exhaustiva para conocer el tipo de problemática que rodea el contexto social y escolar.
Si al Programa Nacional de Convivencia Escolar (PNCE) se le da una partida económica lo bastante sustentable como para poder resolver toda la problemática que lo rodea, ¿porque las autoridades no han hecho nada al respecto con las situaciones que se están viviendo dentro de las instituciones educativas, a dónde está todo ese recurso destinado para el programa?, y si éste no está funcionando como debería, para que seguir disfrazando los malos hechos por los buenos que no han podido solucionar, desde antes de que la pandemia nos alcanzara.
En este sentido y con los antecedentes antes mencionados urge una reestructuración al Programa Nacional de Convivencia Escolar, pero también es importante que no se deje en el olvido todo lo que se ha logrado, ya que en sus inicios hizo su función para el que fue diseñado
La violencia Escolar es un asunto muy arraigado y hay que aprender que son tres tipos de violencia escolar las cuales son: violencia de la escuela, contra la escuela, y en la escuela, pero que ahorita sino se atiende se corren muchos riesgos, sobre todo si consideramos la violencia contra la escuela porque cada vez están aterrorizando a toda la comunidad educativa y no tiene que ver con la convivencia, esto tienen que ver con medidas más practicas por parte de las autoridades.
Se han observado experiencias exitosas en la comunidad DARE "Educación Preventiva Contra el Consumo de Drogas y la Violencia". Como lo son los policías dando cursos de capacitación a diversas instituciones públicas y privadas con la intención de inyectar de información a todos los interesados sobre cómo actuar cuando se presenten problemas relacionados a los diferentes tipos de violencia
El PNCE tiene su antecedente en el Proyecto a favor de la convivencia escolar (PACE) que inició en el ciclo escolar 2014-2015, con la participación de 18 mil 500 escuelas primarias de tiempo completo de todo el país. En el ciclo escolar 2015-2016 se amplió a 19 mil 372 escuelas del Programa Escuelas de Tiempo Completo y se incorporaron 15 mil 628 escuelas que participaban en el Programa Escuela Segura, lo que sumó un total de 35 mil centros educativos.
Fue en 2017 cuando se puso en marcha el PNCE en todo el país, el cual es un programa educativo de carácter preventivo y formativo que se implementa en la Educación Básica, con el objetivo de favorecer el establecimiento de ambientes de convivencia escolar sana y pacífica que coadyuven a prevenir situaciones de acoso escolar en escuelas de educación básica propiciando condiciones para mejorar el aprovechamiento escolar. Morelos inició su participación con mil 44 escuelas de nivel básico.