Observador político - Daños colaterales tras elección de Morena

La masacre política que otra vez padeció  el sábado 27 de agosto en el Hotel Villa Béjar en Cuernavaca el coordinador General de Política y Gobierno de la Presidencia de la República, Rabindranath Salazar Solorio tan solo es el preámbulo de lo que puede ocurrirle en el 2024 tras la división y traición existente entre los integrantes de su denominado grupo: “Los Rabines".

LA TRAICIÓN.- Al transcurrir los días, poco a poco se van destapando los principales motivos de la dolorosísima derrota interna que sufrió otra vez este grupo sobre todo, porque ya todos en su grupo saben de la ausencia constante y permanente del contador en la tierra de mi general Emiliano Zapata Salazar. Pero además,  la soberbia, la falta de apoyo a los suyos y en especial por el menosprecio hacia diversos sectores del pueblo de Morelos como ocurrió con los militantes morenistas. Este tal vez fue el principal motivo por el cual este grupo hegemónico fue desplazado del control político y económico en el partido que fundó Andrés Manuel López Obrador.

Es importante mencionar algunos puntos que hoy en día resultan fundamentales para saber qué fue lo que realmente pasó para haber recibido ese tren que les pasó literalmente encima, debido a que la derrota fue tan brutal más aún cuando ellos eran los dueños y señores de Morena en Morelos.

Basta decir que hace unos días la dirigencia que encabezó el delegado del Comité Ejecutivo Nacional en funciones de presidente, Raúl Ojeda Zubieta –hoy presidente del Consejo de Morena en Tabasco-, despidió al personal y además, como medida de presión decidió ya no pagarles a los empleados su quincena, a la mala, sin decir agua va y en pleno proceso de la elección.

SI HUBO DESPIDO DE PERSONAL.- Algo que resulta fundamental y que se tiene que decir, es el hecho de que algunos integrantes fieles al grupo del Coordinador General de Política y Gobierno de la Presidencia de la República optaron ya no apoyar a Rabindranath Salazar Solorio por la grave división familiar que detectaron desde hace varias semanas, situaciones encontradas que los llevó a cumplir acuerdos.

Otro punto a destacar es el hecho de que muchos militantes quiénes durante años trabajaron y se la rifaron con el senador Radames Salazar Solorio, quedaron en el olvido, fueron abandonados a su suerte y al final los dejaron prácticamente libres. Más aún, cuando se sintieron prácticamente desamparados, huérfanos políticos cuando se percataron que su guía, su líder ya no estaba con ellos. Al final, cansados de los malos tratos decidieron “jugársela” con el equipo contrario. Es decir, apoyaron la candidatura de Ulises Bravo Molina a quien fortalecieron e impulsaron ya que al final resultó ganador de la contienda.

Hoy, todos esos son considerados por el contador y su equipo perdedor como "traidores" sin serlo. Sobre todo, porque en verdad, los que traicionaron sobre todo a estos tres personajes que hoy han sido señalados fueron Los Rabines y no de ahora, sino desde hace mucho tiempo. Solo hay que recordar que el senador tiene más de un año que lamentablemente perdió la vida por el covid, tiempo el cual jamás fueron integrados a las actividades partidistas. Los hoy acusados de traidores son las verdaderas víctimas de los Rabines.

Pero no fueron los únicos a quienes traicionaron los del equipo de Rabín Salazar sino que además, la dirigencia estatal hizo su parte. Más aún porque no realizó ningún trabajo partidista durante los últimos tres años, tiempo en el cual, decidieron erróneamente alejarse de las bases, de su verdadera fuerza social, de aquellos que los hacen líderes pero que también al darles la espalda son quienes los deshacen.

APLICARÁN AUDITORÍAS.- Desde hace años diversos grupos y militantes morenistas han solicitado a la dirigencia nacional de Movimiento de Regeneración Nacional que informen de los recursos, sobre todo cuando se sabe que reciben más de millón y medio de prerrogativas y que al año superan los 15 millones de pesos. Sin embargo, la respuesta siempre ha sido que el recurso financiero lo administra el CEN y desde México solo les mandan los dineros que requieren para el pago de nómina y cuenta corriente.

A pesar de ello y sin tener la confianza y sí muchas dudas de cómo han administrado el recurso que les entrega mes con mes el Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac), entre las primeras acciones y que será prioritario llevar a cabo por parte del nuevo Comité Estatal será el auditar a las administraciones que dirigieron Miguel Lucía Espejo y Gerardo Albarrán Cruz, además de que se les dará vista al Comité Nacional de Morena.

Sobre todo, cuando se sabe que el dinero de la nómina del 15 al 31 de agosto fue usado para la votación de la dirigencia estatal y por esa razón no se les pagó a los trabajadores quienes siguen molestos y con amenazas de acciones de presión y manifestaciones para obligarles a pagar lo que les adeudan.

Por si fuera poco, los trabajadores que fueron despedidos hoy más que nunca están furicos y anunciaron que van a demandar su liquidación en la Junta de Conciliación y Arbitraje, al asegurar que tienen de entre tres, cuatro y cinco años laborando en ese instituto político.

Lo que es cierto es que Rabindranath Salazar Solorio en lugar de buscar apoyo de sus "amigos" periodistas morelenses, decidió pagaron publicaciones en páginas nacionales, que a su vez pagaron publicidad en el Facebook para deslegitimar el triunfo de Ulises Bravo Molina.

Esta elección de la dirigencia estatal confrontó y generó una división entre la familia de Rabín. Los días han transcurrido y siguen muy dolidos. Entre ellos mismos se traicionaron.

Finalmente, Rabindranath Salazar otra vez le dio muy malas cuentas a cabecita de algodón, porque la votación de los de Morena reales, fue del 30 por ciento de todos los votos. Algo insignificante para un gubernamental, quien está cerca desde hace años del presidente Andrés Manuel López Obrador y el casi dueño del partido al menos desde su fundación en Morelos.

El tabasqueño Raúl Ojeda en su momento dijo que eran falsos los rumores y que desconocía de dónde salió la información del despido de personal del partido Morena. Incluso, advirtió que él los acompañaría en caso de que se manifestarán y protestarán para defender no solo su fuente de trabajo sino sus derechos políticos. De ser cierto esto, de tener palabra y cumplir sus convicciones en los siguientes días se estará sumando a las manifestaciones y actos de repudio porque él fue quien no les entregó su cheque de la quincena correspondiente. Por ese tipo de actitudes que fue una constante, es que el grupo hegemónico perdió hasta su conciencia.

SINOPSIS.- La primera acción del nuevo dirigente de Morena en Morelos, Ulises Bravo fue favorecer al perdedor Arturo Pérez Flores en la Coordinación  del Grupo Parlamentario en el Congreso en sustitución de Paola Cruz Torres, del grupo de Rabín; la llegada de Gabriela Marín al poder Legislativo tras haber sido destituido Roberto Yáñez fue a través del Partido Morelos Progresa, pero más rápido que de inmediato rectificó y ahora Morena ya tiene una integrante más para conformar un Grupo Parlamentario de siete en lugar de seis… solo que en los próximos días lo hará oficial en el Congreso.

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