Legislar y gestionar

En opinión de Juan Salgado Brito

Legislar y gestionar

Los diputados locales y federales tienen como función primordial legislar, como representantes del pueblo, pueden presentar iniciativas de ley, puntos de acuerdo y participar con voz y voto en el debate y la aprobación de reformas, modificaciones o de nuevas disposiciones legales, estas entre otras de las facultades que tienen como legisladores y como partes integrantes del cuerpo colegiado que es el Congreso sea del Estado o el Federal. Su participación como directivos o miembros de las comisiones legislativas es determinante porque es allí donde se discute y aprueba o no toda iniciativa, en todo caso su filiación partidista es ingrediente importante para enriquecer la discusión y el debate de las propuestas sin menoscabo de reconocer que la democracia conlleva siempre a que gane la mayoría sea en el pleno o en comisiones.

Es costumbre y tradición que la ciudadanía vea en sus representantes ante el congreso, lo mismo a un legislador que a un gestor social que ayude a sus representados a resolver sus problemas personales, familiares o de su comunidad, tramitando beneficios y respuestas ante autoridades y dependencias de los tres órdenes de gobierno, compromiso éste, que quizá le importa más a la población que cumpla su diputado o diputada antes que darle la dimensión real al deber de legislar, lo cual sin duda es de lo más trascendente y relevante.

Ahora que está de moda la relección de alcaldes y legisladores, sin duda la ciudadanía se ha venido ocupando con más atención del desempeño de sus autoridades y representantes; por lo cual, si bien importa la tarea legislativa, a las personas les interesa sobremanera que su legislador sea un buen gestor que le abra las puertas para obtener solución y respuesta al planteamiento de sus necesidades y problemas personales o de su comunidad.