La sociedad de los POETAS EBRIOS - Covid-19 y Morelos: numeralia / Esos pendientes

En medio de una avalancha de información "fake", popular y oficial, no es difícil perderse en las aguas revueltas del océano que significa el covid-19. Ello lleva a la desesperanza (a algunos), la confusión (a otros), el terror (a no pocos), el valedmadrismo (a una buena cantidad) y numerosos estadios intermedios, a todos los demás.
Como en no pocos campos de la vida, aquí puede rescatarnos y llevarnos a buen puerto uno de los inventos más grandiosos de nuestra historia: los números. Un vistazo a ellos, más que otro factor, ha de UBICARNOS EN LA REALIDAD. Destacamos algunos cuantos, en torno al virus ése que, literalmente, prendió a todo mundo.

ACOSADOS POR 40
A diferencia del año pasado en cuanto al DENGUE, cuando el estado fue uno de las peores en el país, en materia de coronavirus MORELOS SE MANTIENE ESTOICO ante la muy temida enfermedad. No sólo no teníamos hasta ayer un solo caso confirmado. Los "sospechosos", igualmente, habían sido mínimos (5, dijo ayer la autoridad local). Este miércoles sólo tendría que haber uno más en estudio (con la esperanza que sea declarado negativo; no será una TRAGEDIA, empero, si pasa lo contrario).
Ello es sobresaliente, porque la nuestra es una entidad en medio de una de las zonas más golpeadas por los enfermos plenamente confirmados en el país, que sumaban al corte del 16 pasado: 40 (casi la mitad nacional). En la CDMX, de la presidenciable Sheinbaum, hasta ese corte eran 21; en Puebla, del desquiciado Barbosa, 9; en el Edomex, del transísima Del Mazo, 8 y en el sufrido Guerrero, del impresentable Astudillo, 2. Agregue usted, en promedio, el doble de casos sospechosos en esos lugares y, como nosotros, MARAVÍLLESE porque, HASTA EL MOMENTO, estamos salvos.
Es cuestión de tiempo. Habrá, sin duda, casos positivos ("se los garantizo", diría López Gatell), algunos de los cuales ya andarán entre nosotros, pero no lo saben, y seguramente se presentarán en cualquier momento. No tendríamos que dejar fenecer al optimismo, y habremos de mantener la idea que el estado puede no caracterizarse por el CRECIMIENTO EXPONENCIAL del mal. Confiaremos en la sensatez de las familias tlahuicas, de lo cual dependerá la magnitud del golpe (más que en sus autoridades, que no han sido capaces de atender los mínimos indispensables en otras áreas, para los que están rentadas a nosotros).

HIPÓTESIS A: 1% DE MORELENSES, CON EL VIRUS
El crecimiento y la velocidad donde el virus ha golpeado espantan. Sin embargo, si uno analiza el alcance CUANTITATIVO del fenómeno, se debería entender que LA POSIBILIDAD DE ESTAR EN LA MALIGNA ESTADÍSTICA ES MÍNIMA. Pongamos el ejemplo de CHINA, obviamente, el peor. Al corte del 15 de marzo, había poco más de 81 mil casos confirmados (permítasenos, a partir de aquí, redondear cifras, de las oficiales, aunque sea en lo mínimo). Con una población hoy de casi MIL 400 MILLONES de habitantes, el porcentaje de chinos enfermos representa el:
¡0.005 POR CIENTO! de su gente.
No hay espacio suficiente para la misma operación en otras naciones GRAVEMENTE zarandeadas (Corea del Sur, Irán, Italia, España, por ejemplo). Pero los porcentajes siempre se mantienen MUY BAJOS, incluso ahí, donde ya están ENCLAUSTRADOS. Cualquier muerte es lamentable, pero hay que dimensionar el alcance que esto nos puede implicar y sabremos que, a diferencia de las mentiras que circulan en la red y de boca en boca (que se enfermará la mitad de los mexicanos, que morirá el 10 por ciento, que no sé qué), LA GRAN MAYORÍA SALDRÁ LIBRADA DEL VIRUS.
En un escenario catastrófico, SIN base alguna en la ciencia y su experiencia, supongamos que en Morelos se enferma “sólo” el 1 POR CIENTO de la comunidad tlahuica. (Con base en el Censo del INEGI de 2010, en la proyección de Conapo para el estado en 2020, podremos redondear el número en 2 millones de personas aquí). Si de cada 100 en esta tierra, UNO contrae el covid-19, implicaría que 20 MIL MORELENSES deberían caer en sus garras. No hay que apellidarse Gatell para pronosticar que jamás se llegará a nada cercano.

HIPÓTESIS B:  0.01% DE MORELENSES, VÍCTIMA MORTAL
En el temido renglón de muertos, a la fecha referida, los víctimas chinas eran poco más de 3 mil 200. Esto es, por coronavirus, ALLÁ, ha perdido la vida, el 0.0002 POR CIENTO de su población.

Pongámonos alarmistas otra vez (siguiendo el juego de la rumorología y la desinformación), y lancemos la burda idea que aquí morirá el 0.01 POR CIENTO por lo mismo (es decir, uno de cada mil; se nos haga el teclado chicharrón) de los habitantes estatales por la PANDEMIA: habríamos perdido a ¡2 mil morelenses!, más de la mitad de los fallecidos en China (TAMPOCO sucederá nada parecido).           

La inteligencia y la sensatez deberá concluir aquí con DAÑOS MÍNIMOS. LA INMENSA MAYORÍA DE MORELENSES no tendrá contacto alguno con el covid-19. Se aceptan apuestas.

Habrá que ver, sin embargo, si los SSM tendrán la capacidad de atender CON DECENCIA Y LOS MÍNIMOS REQUERIDOS a las POCAS (con base en el razonamiento anterior) víctimas del covid-19, a los ancianos, mujeres embarazadas y quienes padecen enfermedades crónicas, con débiles sistemas inmunológicos. Ahí, en dicho renglón, cuando nos hemos asomado a los centros de salud públicos, estatales, y desde luego al IMSS o ISSSTE, NO CABE LA CONFIANZA. Y ya ni pensemos en medidas de apoyo que en Europa asume el Estado (servicios como luz, agua, gas y hasta rentas, gratuitos, en la coyuntura). Ahí, el OPTIMISMO DEVIENE EN UTOPÍA si eres morelense o mexicano.

Por no dejar: los pendientes

No son los pendientes que le regalé. Son esos asuntos que no han de perderse de vista. El coronavirus APLASTÓ a temas que ganaban espacio, como los del feminismo y la lucha que nadie debe abandonar en cuanto al abatimiento de los ataques e injusticias contra ellas. Hay muchos más, pero especialmente a ése hay que rescatar de entre lo que el virus pretende ofuscar y forzarnos a desatender.