Juego de Manos - Tenemos gobernadora. Tenemos presidenta.

Cómo era de anticiparse, México y el estado de Morelos tienen, por primera vez en su historia, una gobernante mujer. Este es un hecho que no se debe tomar por menor, pues marca un parteaguas en la historia política nacional. Un gobierno con una inherente perspectiva diferente puede significar la atención a problemas históricamente relegados, así como la atención a sectores que, a lo largo de los años, han sido puestos en segundo plano.  

Este también debe servir como mensaje contundente para las instituciones políticas. Habiendo cruzado esta primera frontera, y con la intención de no dar paso atrás, los partidos deberán apostar a que la formación de nuevos cuadros se realice con perspectiva de género, es decir, con equidad de oportunidades y evitando prácticas antiguas, discriminatorias y machistas. ¿Más vale tarde que nunca? 

En el escenario nacional, la nueva presidenta de México será la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo y, a partir de sus discursos y propuestas, podemos esperar, primeramente, una continuidad del proyecto de nación que encabeza el presidente López Obrador.  

Ojo, que la concordancia con los principios y metas del proyecto actual no significa que este nuevo capítulo sea una copia idéntica del que está por terminar. Algunas diferencias que podemos anticipar a partir del discurso y la trayectoria de la futura presidenta son la apuesta al desarrollo tecnológico y a las energías renovables. 

Por otro lado, la Ciudad de México sirvió como un aparente termómetro para algunos pronósticos de la contienda 2024. Del 2018 al 2021, el partido en el poder perdió 4 de las 11 alcaldías que gobernaban y, con ello, la capital del país se dividió en dos partes: PAN-PRI-PRD con 8 alcaldías (más 1 alcaldía del PAN) y Morena-PT con 7 alcaldías.

Ahora, contrario a la aparente tendencia a la baja de la simpatía morenista en la capital, todo indica que el partido presidencial y sus aliados se harán de 10 de las 16 alcaldías (más una que ganaría Morena en solitario). Aunado a ello, Clara Brugada, morenista ex alcaldesa de Iztapalapa, se llevó la victoria en la contienda por la Jefatura de Gobierno y, con ello, Morena y sus aliados se llevaron el botín del centro del país: el Estado de México (en 2023) y la capital mexicana.

En la Tierra de Zapata, luego de una competida contienda, la candidata morenista, Margarita González Saravia, será la nueva gobernadora del Estado de Morelos. La honestidad y el trabajo han caracterizado la trayectoria profesional de la gobernadora electa y, por ello, el horizonte se pinta soleado a partir del sufragio de centenares de miles de morelenses. 

Día a día hemos visto como figuras muy presentes en la agenda y de gigantesca relevancia para la vida pública nacional, como la del propio presidente López Obrador, pierden foco y relevancia a un ritmo en constante aceleración. A partir de hoy, la velocidad de este proceso se incrementará a la par de que aumenta la relevancia de las y los nuevos electos. 

Enhorabuena a todas las personas que resultaron ganadoras en la contienda de este domingo. Ahora, el reto y la responsabilidad está en hacer uso de la confianza que les brindó la ciudadanía, en beneficio del pueblo a quienes se deben. Con honestidad, trabajo y dedicación, se tiene que sacar adelante a los distritos, las ciudades, los estados y el país. 

Más allá del Ejecutivo 

¿Y las Cámaras como quedaron? El Congreso de la Unión será territorio aliado para el proyecto de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, luego de Morena y sus aliados consiguieron la mayoría en la Cámara de Diputados y en la Cámara de Senadores (lo anterior, de acuerdo con las cifras que arroja el PREP al momento en que se escribe esta columna).

Si volteamos la mirada al 2018, podemos ver que, con una vista general, en estos comicios de 2024 Morena obtuvo un incremento en sus votos de alrededor de 3 puntos porcentuales para el Senado de la República y la Cámara de Diputados, lo que equivale a cerca de 4 millones de votos.

Esto significa que, desde Palacio Nacional, se podrán impulsar las últimas reformas propuestas por el presidente López Obrador, en el periodo de un mes de desfase entre la entrada del nuevo poder legislativo y la entrada del nuevo ejecutivo. Ello, claro, si están alineados los intereses del presidente saliente con los de la presidenta entrante.  

El escenario es similar en Morelos, pues el Congreso del Estado pinta para contar con una mayoría de Morena y sus aliados. Destaca la figura del exalcalde de Jiutepec, Rafael Reyes, quien seguramente jugará un papel de liderazgo en el legislativo.  

El Poder Legislativo es uno de los contrapesos del Ejecutivo, y es desde donde se puede impulsar u obstaculizar el proyecto de la presidenta y de la gobernadora. Por ello, es clave la creación de alianzas estratégicas y contar con figuras líderes con la capacidad de negociar con todos los colores y banderas, para que los parlamentos no se conviertan en congeladoras de proyectos.  

Por cierto 

Algunas reflexiones de esta contienda: ganar la percepción no significa ganar la elección. El trabajo de estructuras y de territorio es fundamental para el triunfo político electoral. Es fundamental contar con una estrategia de comunicación que sea efectiva y atractiva para las y los receptores. Las encuestas, todas, se pueden (y tienden a) equivocar, suelen servir más como herramienta discursiva (siempre y cuando no se desgaste) que como termómetro certero.

Y, finalmente, habrá que esperar los resultados finales para ver cuántos de los 12 partidos con registro en Morelos (7 con registro nacional y 5 con registro local) mantendrán su registro luego de estas elecciones. Luego de la contienda del 2021, fueron 10 las instituciones políticas que perdieron su registro al no alcanzar el 3% en las votaciones locales.

Con la conclusión de esta jornada electoral, un nuevo capítulo comienza: 

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