El Estado no tiene el control del Cereso: administrativos
Por esa razón se niegan a laborar ante la falta de condiciones de seguridad al interior de la cárcel
Pese a la aparente tregua entre grupos antagónicos que buscan el control del penal, los conflictos siguen
De acuerdo con el personal administrativo del penal de Atlacholoaya, el Estado no tiene el control del reclusorio, por esta razón se niegan a laborar ante la falta de condiciones de seguridad al interior de la cárcel.
A pesar de que existe una aparente tregua entre los grupos antagónicos que buscan el control interno dentro del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Atlacholoaya, los conflictos siguen al interior del penal, revelaron los trabajadores.
Este lunes, el personal penitenciario no ingresó al penal a laborar, refirieron que hasta que no ingresen elementos de seguridad para vigilar a los reos y generar las condiciones para desarrollar su trabajo, no laborarán y seguirá su protesta.
Reconocieron que tienen miedo, tras los desmanes del pasado martes y miércoles que cobraron la vida de siete internos y dejó cuatro heridos.
“Claro que no hay control al interior, no hay una seguridad de que los internos estén en sus celdas, sabemos que no están en su propias celdas parece que estuvieran en un hotel. Qué garantiza que nosotros trabajemos bien y seguros, si agarraron de rehenes a custodios, a nosotros también nos pueden hacer lo mismo, por eso no queremos entrar, por eso tenemos temor a que nos pase algo”, dijo una trabajadora administrativa, que prefirió no revelar su nombre.
Pero también dijo que la protesta es para exigir aumento de salario, y la destitución del coordinador de Reinserción Social, Jorge Ponce de León Bórquez, por ser el presunto responsable de los disturbios de la semana pasada.
Finalmente expresó: “Necesitamos la cabeza principal para que todo esto se calme. Tenemos temor de que algo nos pueda pasar a nosotros, tenemos estrés, vivimos una crisis de ansiedad, es algo temeroso y alarmante entrar y que otra vez vuelva a pasar lo que vivimos el pasado martes y miércoles”, finalizó.