Denuncian corrupción adentro del magisterio
En el SNTE siguen “pidiendo” evaluaciones a maestros, aferrándose a la reforma de Peña Nieto
Solicitan se reconozca la figura de Asesores Técnicos Pedagógicos, que es una “imposición del sindicato”
La profesora Julita Villalba Alias, quien pertenece al Movimiento Magisterial de Base, expuso que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación sigue “pidiendo” las evaluaciones a los maestros, como una forma de aferrarse a la reforma de Enrique Peña Nieto, otrora presidente de la República.
Asimismo, comentó que desde ese órgano se solicita que se “reconozca la figura de ATP” (Asesores Técnicos Pedagógicos), que se trata de profesores que han llegado por “imposición del sindicato”.
En entrevista exclusiva, externó que esos profesionistas arribaron por “compadrazgo y corrupción”. Los ponen en esos puestos sin haber “hecho nada”. Asentó que esa figura, el ATP, se “debería de encargar de “realmente asesorar a toda la zona escolar, para orientarlos en el proceso pedagógico”. Y no es así, según.
Agregó que, “desafortunadamente”, esa imagen ha sido sólo de carácter administrativo y “no tienen ninguna otra función”. Por tanto, consideró que eso es “totalmente ilegal”, porque fueron “impuestos” por el sindicato, por los fenómenos de corrupción e imposición.
Adujo que “eso no es factible” y, con base en eso, solicitó que la instrucción sea diseñada para los maestros frente al grupo, de manera directa, no a “través de intermediarios”; esto ha hecho que “no funcione el proceso de capacitación”. Ésta se da a los supervisores; y de éstos, al jefe de sector; luego, al director, y la corrupción se filtra por ahí.
“Son cuestiones que ya se tienen que terminar”, aclaró. Y, a la vez, dijo que no debe de haber embudos; “la capacitación tiene que ser directa y de manera presencial, que es otro elemento que consideramos muy importante”.
Añadió que existen pedagogos que están preparados para ello (en la Universidad Pedagógica Nacional); los cuales, cuentan con “muchos años de experiencia, que nos podrían compartir claramente los métodos y procesos de enseñanza-aprendizaje”.
Demandó, al final, una educación “humanista y transformadora”; sobre todo, que se respeten los derechos laborales de los de nuevo ingreso y de los mentores que “ya estamos”. Difieren, dijo, con las propuestas del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, en el sentido de que “ellos siguen pidiendo las evaluaciones”, que, en el pasado, se denominaron “punitivas”.