Concepto Social de Discapacidad - David Werner: Tecnologías innovadoras para, por y con Personas con Discapacidad
En opinión de Eliseo Guajardo Ramos
En la Sierra de Sinaloa, en 1963, apareció un biólogo preocupado por la salud de los más desfavorecidos en el ámbito de la ruralidad de sus habitantes. Se trató de David Werner, ampliamente conocido por su clásico libro emblemático “Donde no hay doctor”. Quizás muchos ya lo puedan ubicar, porque su libro es más famoso que él mismo. Si es que eso puede ser posible.
En diciembre del pasado año, tuve oportunidad de conocer a Werner en el mismo evento que organizó la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS). Y me llamó poderosamente la atención de otra de sus obras publicada en inglés por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, publicada en 1999 por Editorial PAX pero reeditada en español en 2007. Se trata de “Nada de nosotros sin nosotros. Desarrollando tecnologías innovadoras para, por y con personas discapacitadas”.
Es un libro desarrollado por este ínclito autor y su equipo integrado por personas con discapacidad. Dicho equipo se conformó en un Programa de Rehabilitación Organizado por Jóvenes Incapacitados de México Occidental (PROJIMO). Este programa tuvo un financiamiento internacional durante 3 años. Pero prevaleció a lo largo del tiempo en la sierra. En ese tiempo tuvieron visitantes expertos en rehabilitación y en ingeniería. Extranjeros. En los agradecimientos por la colaboración en este libro se suman más de cien participantes de diferentes partes del mundo y de México, entre los que se encuentran niños y jóvenes con discapacidad y sus padres, también.
Básicamente, traban con discapacidad motora y malformaciones del aparato músculo esquelético de los niños y jóvenes. Porque es en lo que tenían mayor experiencia los integrantes de PROJIMO.
Es un libro de “ideas” para resolver problemas, no de recetas e instrucciones de cómo hacerlo. Los ejemplos de solución sólo ilustran el procedimiento de cómo se llegó a estos resultados, pero no para generalizarlos ni aplicarlos tal cual en cualquier otro caso. Como es un libro para personas que tienen poca escolaridad, tiene un lenguaje sencillo, coloquial y con dibujos que ilustran cómo se crea el instrumento, su aplicación y su técnica. Prefieren el dibujo sobre la fotografía. Porque los dibujos tienen más claridad sobre lo que se quiere ilustrar, a diferencia de la fotografía que da certidumbre sobre las prótesis que son fabricadas de forma personalizada para cada caso que aquí se expone.
Desde la introducción abordan el tema del liderazgo de las personas con discapacidad en la búsqueda de soluciones. La parte primera se denomina “El niño no es un costal de papas”. El capítulo 1, se llama “Un asiento para que Carina pueda vestirse sola”; el 2, Asientos con posiciones variables para satisfacer diferentes necesidades de Jazmin; el 3, es un tanto más general, “artefactos para medir y evaluar: útiles en el diseño de asientos especiales y tablas para estar de pie”; el 4, “Un asiento con ángulo positivo para que Toño pueda ´ver’ y Edgar aprenda a caminar”; y así sucesivamente. Se trata de un enfoque personalizado, no individualizado. Con los recursos disponibles y de bajísimo costo, dada la precariedad de la comunidad rural donde tiene como población objetivo PROJIMO.
Lo anterior es una pálida pincelada de cómo enfoca esta obra cómo se realizan innovaciones muy originales a la medida de cada persona para que logren una inclusión en la comunidad en tareas cotidianas, escolares, laborales y recreativas. Soluciones acordes a las necesidades específicas y a la media de los recursos disponibles. Coloca a las personas con discapacidad como parte protagonista. Se trata de soluciones inspiradoras para otras soluciones no repetitivas, ni generalizadas, pero sí adecuadas y eficaces.
Pasa luego a invitar a los lectores a que aprendan nuevas ideas para escribir otro libro similar al que pone a la disposición de los interesados. Los invita a crear con imaginación soluciones para otros niños y jóvenes con discapacidad. Además, que las compartan con PROJIMO estas innovaciones. Los invita a que formen parte del Boletín de la Sierra Madre de PROJIMO que llegan a 130 países. Y si las ideas que envíen son sedicentes, se estaría editando un nuevo libro similar.
David Werner es un personaje fuera de serie. Se adelantó a su tiempo, que apenas atisba el contexto que puede recibir las respuestas que ahora reclaman las personas con discapacidad, particularmente, la discapacidad de movilidad corporal.
Esta invitación me recordó a “Los Cuadernillos de Integración Educativa”, de Educación Especial de la SEP, en los 90s en las que se agregaban páginas en blanco para que los docentes lectores hicieran sus aportaciones y fueran enviadas para ser tomadas en cuenta en el proceso de transformación de los modelos de atención por parte de la dirección.
¡Enhorabuena a las innovaciones tecnológicas de bajo costo como ayudas técnicas!
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