Vecinos no olvidan la “masacre de Temixco”, aún temen a policías
A casi dos años, ningún agente fue procesado por el uso desmedido de la fuerza pública
Incluso, dos de ellos se fueron del estado para comenzar a trabajar como policías en Q. Roo
A casi dos años de la masacre en Temixco, a manos de elementos del entonces Mando Único, sin culpables ni castigos, el domicilio sigue en completo abandono, vecinos de la colonia Rubén Jaramillo "aún viven con temor a los policías"; el inmueble, presuntamente, ya fue desasegurado, ahora solo quedan huellas de los sellos oficiales.
Aún hoy la calle Francisco I. Madero de la colonia Rubén Jaramillo se encuentra desierta, pocas ventanas abiertas y sin vecinos en los alrededores, al mismo tiempo las calles aledañas lucían vacías.
De un buen número de locales comerciales que se notan en las inmediaciones, solo unos pocos aún se mantienen dando servicio, los demás estaban con las cortinas abajo, pintadas con grafiti, marcadas, tal vez, para no volver a abrirse jamás.
El ambiente en aquellas calles se percibe tenso, las miradas de las personas se dirigen, sin recato alguno, a los extraños, como con cierta angustia, la observación de las personas no parece común, lo que causa un escalofrío que te recorre.
De vuelta a la calle Francisco I. Madero, ya no se observa la patrulla que resguardaba constantemente el domicilio 238 donde ocurrió aquella tragedia, un presunto enfrentamiento derivado de un operativo que, “supuestamente”, terminó en un enfrentamiento a balazos.
Aquel fatídico día, durante la supuesta refriega cuatros adultos, un adolescente y un bebé murieron, por lo que la casa quedó bajo resguardo mientras se llevaban a cabo las investigaciones, y a casi dos años, ningún policía fue procesado por el uso desmedido de la fuerza pública, e incluso, dos de ellos se fueron del estado para comenzar a trabajar como policías en Quintana Roo, llevados directamente por el actual comisionado de seguridad de aquella entidad, Jesús Alberto Capella Ibarra.
Actualmente los sellos de seguridad de la casa fueron retirados, además, ya no cuenta con elementos de guardia, por lo que el dueño del inmueble puede volver a hacer uso de la casa en el momento que lo requiera, esto a partir de la falta de pruebas para procesar a policías o a otros integrantes de la familia detenidos, por lo cual el proceso “ha terminado”.
Pese a esto algunos de los vecinos aún reflejan el temor y el nerviosismo cuando observan pasar una patrulla, uno de los habitantes, quien prefirió evitar su nombre expresó que “no confían en los policías, no después de lo sucedido [en el 238]”.
Cabe señalar que el mes pasado el gobierno del estado no ha logrado tener contacto con las víctimas de la masacre en el municipio de Temixco en el 2017, durante el sexenio de Graco Ramírez, informó José Luis Manzo Velázquez, jefe departamento de la Dirección General de Derechos Humanos del Poder Ejecutivo.
En aquel momento el funcionario explicó que sigue el proceso para cumplir con la recomendación 21VG/2019 que hizo la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) al Gobierno de Cuauhtémoc Blanco Bravo por grandes violaciones a los derechos humanos en la masacre de seis personas en el municipio de Temixco en el 2017, durante el sexenio anterior.