Serpientes y escaleras - Acusaciones sin acciones

En opinión de Eolo Pacheco

Serpientes y escaleras - Acusaciones sin acciones

El discurso de Lucía Meza es fuerte, pero no le alcanzará para ganar la elección.

 

Acusaciones sin acciones

Antes de recibir la nominación como candidata Lucía Meza ya tenía definidos los ejes de su campaña: si representaba a Morena el discurso iba a ser moderado, pero crítico con el gobierno saliente y la situación de inseguridad, pero desde la oposición el mensaje es duro, crudo, acusador y sin piedad. La abanderada del Frente Amplio tiene enfocadas sus baterías hacia el gobernador Cuauhtémoc Blanco y utilizará los problemas de violencia para ganar simpatías. Ahora lanza una advertencia a su gabinete: va por todo y por todos.

 “Se revisará peso por peso y oficina por oficina” afirma la candidata opositora en una suerte de amenaza para poner nerviosos a los funcionarios y avivar el deseo de venganza entre los ciudadanos que no están de acuerdo con la forma como se ha manejado la administración. A lo largo de las últimas semanas Meza Guzmán ha ido elaborado un discurso colérico que se mueve en el terreno de la especulación, porque a pesar de que insistentemente habla de acciones ilegales y actos de corrupción, no ha iniciado ninguna acción legal al respecto. Todo es mediático.

Pero como se trata de una campaña electoral en donde lo que importa es la percepción, mover los sentimientos y no se necesita probar las acusaciones, la candidata opositora no aporta elementos de prueba, solo trata de hacer creíble su mensaje. Lucía Meza y sus asesores tienen identificada la inseguridad como un tema que interesa a la mayoría de los mexicanos y por ello lo manejan como un argumento eje, aunque siempre en el terreno de la especulación, hablando de omisiones y complicidades, pero sin presentar pruebas, ni ofrecer soluciones.

Lo mismo ocurre con la corrupción: puede ser que en la administración actual existan acciones punibles y hechos que ameritan procesar penalmente a algunos funcionarios, como los que, dicen, han cometido Efrén Hernández Mondragón y Jaime Juárez, pero para llegar a ello se requiere investigar, documentar, denunciar y por supuesto comprobar. Esas acciones no están todavía en la agenda de la candidata, aunque promete que lo hará cuando sea gobernadora.

Desde hace tres meses el discurso opositor es contra Cuauhtémoc Blanco, contra su gobierno y ahora contra su equipo de trabajo; la estrategia es aprovechar el desgaste de la administración y ligar la imagen del ejecutivo a la de la candidata Margarita González, porque hacia ella en lo personal no tienen nada.

El plan funcionó a la perfección cuando solo había un discurso en el aire, cuando Morena callaba y dejaban todo el terreno de la percepción al frente opositor; hoy ya no es así, ahora ya hay un discurso de vuelta que expone que del lado de Lucía Meza no todo es color de rosa, le recuerdan su relación con Graco Ramírez, sus vínculos con el fiscal y aquel terrible pasaje cuando Graco y Elena intentaron robarse la ayuda humanitaria que la gente enviaba a las víctimas del sismo para canalizarla a la campaña de su hijo Rodrigo.

Veámoslo en perspectiva: el discurso tronante de Lucía Meza es bueno per se, pero de vigencia limitada, porque si no se acompaña de alguna acción concreta, aporta pruebas y se mueve solo en el tema de la especulación, se volverá ineficaz antes de que termine la campaña. Además hay que considerar que del lado opuesto ya reaccionaron, ya le entraron al terreno de la percepción y responden los ataques con ataques, solo que en este caso las críticas son directas hacia la candidata, recordando historias de su pasado, amistades peligrosas y hechos terribles como lo ocurrido después del sismo del 2017.

La línea discursiva de Lucía Meza es buena, pero no le alcanzará para toda la campaña si no añade algo más que palabras, sobre todo ahora que ya hay respuesta de la 4T y en la comparación entre personalidades e historias, la neopriísta resulta peor calificada que Margarita González.

Por supuesto que entre un sector importante de la sociedad hay enfado hacia el gobierno saliente y quizá hasta sean reales las acusaciones, pero son hechos paralelos a la campaña y a la candidata de Morena, porque aunque Margarita González fue parte del equipo de Cuauhtémoc Blanco al inicio de su gobierno, estuvo en un área que nada tiene que ver con lo que se denuncia y nunca tuvo cercanía con el ejecutivo.

El discurso tronante del FAM le ha servido a Lucía Meza para ganar percepción y para hacer creer que tiene posibilidades de ganar: criticando al gobernador ya hizo voltear a quienes están enojados con el gobierno y con su titular, el problema es que a ella la relacionan fuertemente con Graco Ramírez, el peor gobernador que ha tenido nuestro estado, indiscutiblemente mucho peor que Cuauhtémoc Blanco.

La precampaña hecha por la candidata opositora ha sido buena porque la colocó en el radar de la elección, pero el discurso anti Cuauhtémoc no le va a alcanzar para toda la campaña si no añade nuevos ingredientes. Además, ahora está en la mesa el factor Graco, con una contracampaña que relaciona a Lucía Meza con el exgobernador tabasqueño, con su equipo y con las trapacerías que cometió ese gobierno contra la ciudadanía.

Sin rival enfrente la percepción de campaña fue durante tres meses de Lucía Meza: ella declaraba, acusaba, afirmaba y marcaba la narrativa la elección; ahora ya está la voz de Morena y la opinión pública se divide no solo en función de lo que cada una representa en lo individual, sino en lo que hay a su alrededor.

Acusar al gobernador, amenazar con proceder penalmente contra él y ahora añadir una advertencia al gabinete es parte de un mismo discurso, no agrega nada nuevo y sobre todo no es algo que no se haya dicho en otras campañas: Graco Ramírez prometió enjuiciar a Marco Adame y no lo hizo, Cuauhtémoc Blanco prometió meter a la cárcel a Graco Ramírez y tampoco lo hizo. ¿Qué garantiza que Lucía Meza actuará contra Cuauhtémoc Blanco?

La que viene es una campaña dura, que en muchos sentidos representa una lucha de poder y de grupos, que definirá el futuro de las dos candidatas e impactará en el destino del estado. La ventaja sigue estando del lado de Morena a pesar del discurso tronante de la posición porque aunque la 4T tiene un desgaste importante entre los ciudadanos, la oposición no es mejor, sus dirigencias son impresentables y los candidatos que proponen son de muy bajo nivel. El discurso de Lucía Meza se está desgastando muy rápido y no le alcanzará para ganar la elección.

Morena no es tan bueno como presumen, pero el FAM si es tan malo como se ve.

·         posdata

La candidata presidencial de Morena visitó Morelos y tuvo eventos masivos en los tres bastiones del obradorismo: Jojutla, Yautepec y Jiutepec; los actos en donde participó Claudia Sheinbaum sirvieron para medir la fuerza de quienes controlan esas regiones, léase Juan Ángel Flores, Agustín Alonso y Rafael Reyes.

Antes las concentraciones multitudinarias la doctora tuvo una reunión en Cuernavaca con docentes, científicos y directivos de centros educativos, a quienes prometió hacer de México una potencia educativa, científica y cultural.

A su llegada al evento mañanero la candidata presidencial fue abordada por el senador Sergio Pérez Flores, quien trató de tocar el tema de Cuernavaca, seguramente reclamando que no le habían otorgado la candidatura a la presidencia municipal. Sheinbaum Pardo fue muy seca, se veía molesta, no lo volteó a ver y ni siquiera detuvo su paso cuando le hablaba; únicamente le dijo “Acepta el resultado”.

La coordinadora nacional de la 4T está enterada de lo que sucedió en Cuernavaca, de cómo ocurrieron las cosas y la forma como se tuvo que resolver el problema generado desde dentro, por el fuego amigo; de ahí su enfado hacia Sergio Pérez y el desprecio en su trato. Recordemos además que cuando la candidata a la gubernatura de Morelos presentó a Alejandra Flores estuvo acompañada de varios candidatos capitalinos, incluyendo a Javier Bolaños, pero quien no estuvo presente fue Pérez Flores. Forma es fondo.

Margarita González Saravia tiene todo para ganar el gobierno estatal, pero en Cuernavaca pueden perder todo: la alcaldía, las diputaciones locales y la federal.

·         nota

El problema de agua en Cuernavaca se agrava en la víspera de que comience la temporada de estiaje; año tras año la falta del vital líquido se agudiza porque los manantiales cada vez están más bajos, a ello se añade el mal manejo del sistema de agua potable.

Evelia Flores, directora del Sapac, se ha convertido junto con Alicia Vázquez Luna en un dolor de cabeza para el alcalde, porque ambas han sido incapaces de manejar eficientemete las dependencias a su cargo; en el caso de la jefa de policía hay que añadir, además, su mal carácter y su evidente incapacidad para comunicar adecuadamente.

Van dos semanas de bloqueos ciudadanos por falta de agua en Cuernavaca y como se ven las cosas la situación se prolongará indefinidamente. Por ahora el sistema municipal de agua se ha quitado la presión de la CFE por corte de luz, aunque el adeudo histórico continúa; los problemas que sufren los ciudadanos de varias colonias, entonces, es por la mala operación y falta de conocimiento de la directora y del equipo de abogados que la acompañan.

A José Luis Urióstegui se le abrieron las puertas de la reelección con Alejandra Flores, porque el único candidato que le pudo ganar fue boicoteado por los propios morenistas; ahora su lucha es contra sus colaboradores y el mal desempeño de algunos.

En los últimos meses el gobierno de la capital ha invertido muchos millones de pesos en obra pública, pero estos logros se pueden opacar si el problema de suministro de agua y la inseguridad continúan o se agravan.

Reitero: José Luis Urióstegui es una buena persona, tanto que le da miedo hacer a un lado a quienes no le ayudan.

·         post it

Así describen a Lucía Meza Guzmán, candidata del Frente Amplio Opositor a la gubernatura de Morelos:

“Aquí en Morelos vamos con una mujer que ustedes conocen, compañera, amiga, comprometida y trabajadora, aquí esta Lucy Meza para presentar una propuesta, una plataforma y un proyecto que le den a los morelenses, a todas las mujeres y hombres comprometidos, a los jóvenes… vamos a iniciar con el pie derecho, trabajado fuerte, no tengo duda que vamos a ganar…(Lucia Meza) es una mujer comprometida, echada pá adelante, es una mujer íntegra, honesta, que trae lo mejor para Morelos, con propuesta, con proyecto…”

Lástima que quien le echa flores es Alejandro Moreno, el corruptísimo presidente nacional del PRI, acusado de innumerables actos de corrupción, abuso de poder, ilegalidades en el ejercicio público, acoso sexual y laboral, violencia política, enriquecimiento ilícito, complicidades con la delincuencia organizada y naco de siete suelas…

Seguramente en su interior la senadora piensa: ¡No me ayudes compadre!

·         redes sociales

Hagan cuentas: un secretario, una alcaldesa, un senador y un hermano, si todos logran llegar al congreso local, el gobernador tendrá cuatro diputados en el próximo congreso local.

Muchos más que la próxima gobernadora.

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