Reunión en la universidad estatal de especialistas en astrobiología
La astrobiología es el estudio científico y multidisciplinario del origen, evolución, distribución y destino de la vida en el universo, para conocer los avances e investigación en esta área, del 22 al 24 de octubre se reunieron especialistas nacionales y extranjeros en el Centro de Investigaciones Químicas (CIQ) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
El 22 de octubre se llevó a cabo la inauguración del XIII Congreso Nacional de Astrobiología, organizado por la Sociedad Mexicana de Astrobiología, con la presencia de estudiantes e investigadores de áreas como la química, física y biología.
Víctor Barba López, encargado del despacho de la dirección del CIQ, estuvo a cargo de la inauguración en cuyo mensaje, destacó la importancia de acercar a los estudiantes a los especialistas en estas áreas e involucrarse en el conocimiento de la astrobiología para que se lleven reseñas importantes y conocimiento de lo que acontece en el área.
Irene Perea Arango, directora de Investigación y Posgrado, en representación de la rectora Viridiana Aydeé León Hernández, señaló que la celebración del congreso es un motivo de orgullo y un reflejo del compromiso de la universidad con la ciencia de frontera y agradeció a la Sociedad Mexicana de Astrobiología y a los cuerpos académicos de las universidades hermanas por su colaboración.
Perea Arango dijo que estos foros representan una confluencia de mentes y una plataforma para el diálogo que impulsa el saber por la astrobiología; por su naturaleza interdisciplinaria invita a explorar preguntas profundas sobre el origen o el lugar del ser humano en el universo, por lo que la promoción del diálogo y difusión del conocimiento es fundamental para la universidad.
Sandra Ramírez Jiménez, presidenta del comité organizador y de la Sociedad Mexicana de Astrobiología, señaló que el congreso reúne a profesionales dedicados a la investigación en astrobiología con estudiantes y el público en general para discutir los avances más recientes en áreas como astronomía, biología, química, geociencias y medicina.
Dijo que el programa de esta edición incluyó 12 conferencias magistrales, 13 conferencias cortas, 26 carteles científicos y una conferencia de divulgación, y que los especialistas provienen de instituciones como el Cinvestav Unidad Irapuato, el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica, la Universidad Autónoma de Baja California, Universidad Autónoma de Querétaro, Universidad Autónoma de Nuevo León, Universidad Autónoma de Yucatán, Universidad Autónoma del Sonora, la Universidad Anáhuac México, la Universidad Nacional Autónoma de México, la Universidad Veracruzana y la Secretaría de Educación Pública, así como de instituciones extranjeras como el Instituto Internacional de Ciencias Aeronáuticas y la Universidad de París.
Ramírez Jiménez destacó que este congreso se realizó en el marco del 25 aniversario de la Sociedad Mexicana de Astrobiología, organización que ha demostrado su madurez, diversidad y múltiples actividades, y expresó confianza en las nuevas generaciones para seguir impulsando la astrobiología en México.
En el primer día de trabajo, Thomas Bushe, profesor investigador del CIQ, miembro del Sistema Nacional de Investigadores, Nivel III, impartió la conferencia magistral "De los cristales al origen de la vida: caminos posibles a la homoquiralidad de las biomoléculas".
La astrobiología es una disciplina científica que se enfoca en el estudio de la vida en el universo, abarcando áreas como la astronomía, biología, química, geociencias y medicina. Una de las áreas de estudio más importantes dentro de la astrobiología es la búsqueda de exoplanetas habitables, que son planetas que orbitan estrellas distintas al Sol y que podrían tener condiciones adecuadas para la vida tal como la conocemos.
En los últimos años, se han identificado miles de exoplanetas gracias a misiones como Kepler y TESS de la NASA, lo que ha permitido a los científicos estudiar la posibilidad de vida en otros planetas. La detección de vida en otros planetas tendría importantes implicaciones para nuestra comprensión del universo y nuestra relación con él.
Otra área de estudio importante en astrobiología es el estudio de los extremófilos, que son organismos capaces de sobrevivir en condiciones extremas como altas temperaturas, altas presiones, radiación y ambientes ácidos. El estudio de los extremófilos ha permitido a los científicos comprender mejor los límites de la vida y los procesos que permiten la supervivencia en condiciones extremas.
La investigación del potencial de vida en Marte es otra área importante de la astrobiología. Desde la década de 1970, los científicos han estado estudiando la posibilidad de vida en Marte, y aunque los resultados de las sondas Viking no fueron concluyentes, los científicos siguen trabajando para identificar signos de vida en el planeta rojo.
Los avances tecnológicos han sido fundamentales para el progreso de la astrobiología. El telescopio espacial James Webb, lanzado en 2021, es una herramienta crucial para la astrobiología, ya que puede analizar las atmósferas de exoplanetas en busca de biofirmas, como oxígeno, metano y agua. Estos estudios pueden proporcionar pistas sobre la habitabilidad de estos mundos y la posible presencia de vida.
La espectroscopía es otra técnica importante en astrobiología, ya que permite a los científicos analizar la composición química de las atmósferas de los exoplanetas y detectar signos de vida. La espectroscopía de masas y la secuenciación genómica también son herramientas valiosas para analizar muestras astrobiológicas.
La astrobiología también se enfoca en el estudio de la habitabilidad de los planetas y lunas en nuestro sistema solar. Las lunas de Júpiter y Saturno, como Europa y Encélado, han capturado la atención de los científicos debido a su potencial para albergar vida. Estas lunas tienen océanos líquidos bajo sus superficies heladas, lo que las hace entornos prometedores para la búsqueda de vida.
Los modelos computacionales también son una herramienta importante en astrobiología, ya que permiten a los científicos simular condiciones ambientales en otros planetas y estudiar cómo podrían evolucionar formas de vida en esos entornos. Estas simulaciones son esenciales para formular hipótesis sobre la posibilidad de vida en lugares como Europa o Encélado.
La colaboración internacional es fundamental para el avance de la astrobiología. Los científicos de todo el mundo trabajan juntos para compartir datos, recursos y conocimientos, lo que ha permitido avanzar en nuestra comprensión del universo y la posibilidad de vida más allá de la Tierra.
En México, la astrobiología es un área de investigación en crecimiento, con científicos que trabajan en instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México y el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica. La Sociedad Mexicana de Astrobiología también juega un papel importante en la promoción de la disciplina y la difusión de conocimientos sobre la vida en el universo.
Redacción


