Observador político - Los excesos y abusos en el TSJ

El golpe político, económico, social y moral que sufrió un grupo de magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Morelos fue contundente. Y es que, ante los excesos, abusos y ambición del poder y los recursos públicos que se les había otorgado a estos representantes del Poder Judicial fue brutal, por eso, la decisión de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nacional (SCJN), fue aplaudida, vitoreada y reconocida por los morelenses y en especial por los profesionistas del derecho.

PUSO ORDEN LA SCJN EN EL PJ DE MORELOS.- La perversidad con la que actuó Graco Luis Ramírez Garrido Abreu durante los seis años de su gobierno, respaldado por sus cómplices de la 52 y 53 legislatura a quienes siempre sobornó y otorgó todo cuanto pedían, tuvo su clímax en los primeros meses del 2018, cuando los parlamentarios de ese entonces emitieron los decretos que garantizan a los actuales magistrados del Poder Judicial ampliación en su cargo de hasta 20 años y no 14 como lo marca la Constitución. El objetivo siempre fue tenerlos de su lado y lograr su escape y protección ante cualquier eventualidad judicial en la que pudiera verse inmiscuido. Le resultó. Sin embargo, la decisión de la SCN lo puso en evidencia y por tanto, los ministros recompusieron los excesos cometidos en la administración estatal perredista porque quitar en automático a seis magistrados que al menos alcanzaron beneficios económicos “engañosos”, porque obtuvieron alrededor de un millón de pesos por año que han estado fungiendo en el cargo que ya no les correspondía.

María del Carmen Cuevas López, Roció Bahena Ortiz, Valentín López González y Miguel Ángel Falcón Vega, son los personajes a quienes ayer, les cantaron las golondrinas y de la nada dejaron de ser magistrados. A estos cuatro se sumaron Martin Jasso Díaz y Jorge Estrada, del Tribunal de Justicia Administrativa.

Pero el golpe no solo fue político y social, sino económico porque si se hubieran ido en su momento, se habrían jubilado con el sueldo que hoy perciben y que no es cosa menor, porque hay magistrados “vivos” que por los años de haber servido al Poder Judicial, hoy se llevan jugosos recursos que superan los 100 mil pesos mensuales.

Por lo tanto, pese a la crisis financiera que se vive en el país y en Morelos, además de lo difícil que está representando para las diversas instituciones pagar jubilaciones y pensiones elevadas, los magistrados intentaron sin lograr por fortuna porque la Ley no estuvo de su lado, obtener por sus años de servicio alcanzar una pensión vitalicia al 100% del salario mensual y que además, los “angelitos”, le solicitaron en aquél entonces a sus cómplices parlamentarios, que cuando se retirarán del cargo, fuera transferible su jubilación a sus esposas, esposos o hijos, en caso de que ellos fallecieran por cualquier circunstancia. Casi nada.

Por esta razón, la decisión de la SCJN que trajo con dolor de cabeza a los integrantes del Poder Judicial de Morelos, echó abajo todos estos actos que rayaron en lo absurdo porque siempre vieron el beneficio económico sin detenerse a pensar la grave crisis financiera de las instituciones y la incertidumbre de miles de trabajadores. De ahí que fue bien aplaudida la decisión de la Corte les hayan quitado todos esos beneficios financieros y solo autorizarles lo que por ley les corresponde: su haber de retiro en lugar de su pensión vitalicia. Es decir, ahora solo les otorgarán tres meses de salario por cada año de servicio como magistrados en una sola exhibición.

JUBILACIONES Y PENSIONES DEL PODER JUDICIAL.- Solo a manera de ejemplo, ponemos a continuación una lista que emitió recientemente Morelos Rinde Cuentas, respecto de lo que perciben por jubilación varios ex servidores públicos del Tribunal Superior de Justicia:

Ricardo Rosas Pérez: 136 mil 576 pesos; Wilfrido López Luna: 111 mil 520; Samuel Sotelo Salgado, 105 mil 543; Jesús  Vallejo Jiménez: 102 mil 025; Virginia Popoca González: 97 mil 672; Ezequiel Honorato Valdez: 97 mil 540; Aurora Maura Linares Serrano: 93 mil 634; Ramón García Jacome: 90 mil 211; Jesús Guadalupe Dávila Hernández: 90 mil 211; Juan Manuel Díaz Popoca: 90 mil 211; Rodolfo de Jesús Cuevas Salazar: 89 mil440; Leticia Robles Santoyo: 88 mil 473; Jesús Antonio Tallabs Ortega: 87 mil 301; Juan Manuel Jiménez Alegre: 83 mil 653; Roberto Pérez Guerrero: 78 mil 391; María Emilia Acosta Urdapilleta: 67 mil 166; María Guadalupe López Román: 64 mil 028; Maurilia Rosina Domínguez Valdez: 64 mil 028; Florencio Altamirano Chávez: 64 mil 028; Isabel Bello Sotelo: 64 mil 028;  Ladislao Gutiérrez Rendón: 59 mil 479; Salvador Vargas Rangel: 57 mil 857; Guillermo Ortega Ocampo: 48 mil 620; Francisco Javier Lara Manrique: 47 mil 697; María Dolores Páez Vidales: 47 mil 615; Raymundo Arcibar Lazo: 47 mil 572; José de Jesús Arturo Castillo Córdova: 46 mil 143; Gabriel Armando Malpica Vides: 46 mil 101; Guadalupe Delfina Arredondo García: 45 mil 308; y Ángela Navarro Montes con 44 mil 523.

En algunos casos, las prestaciones económicas que perciben tanto jubilados como pensionados del Tribunal Superior de Justicia de Morelos, sobrepasan incluso, más de lo que gana el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, quien perciben 108 mil pesos netos. Sin embargo, tampoco es ilegal el recurso que mes con mes se les deposita a quienes cumplieron décadas de servicio en el TSJ, sin embargo, para muchos es inmoral por las cantidades tan desproporcionadas a las que otros morelenses obtienen por haber entregado toda su vida al servicio público y que no sobrepasan más allá de los cinco mil pesos mensuales. Por ello, para los especialistas en el tema, los diputados deben de legislar para que quienes más ganen dejen de obtener cantidades estratosféricas de recursos públicos en detrimento de la mayoría de los ciudadanos.

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