Escala de Grises - Elementos suficientes

En octubre de 2023, estudiantes del Instituto Politécnico Nacional, denunciaron a Diego “N”, su entonces compañero en la carrera de Mercadotecnia Digital, por vulnerar su integridad y cometer delitos contra la intimidad sexual. Además de poseer fotografías íntimas (manipuladas y reales) de mujeres, entre ellas sus compañeras, el estudiante ofrecía la posibilidad de comprar este contenido a otros estudiantes.

Ante la gravedad de la situación, el IPN acudió a notificar lo ocurrido ante las autoridades correspondientes. Al mismo tiempo, ocho de las víctimas acudieron a presentar una denuncia formal en contra del agresor. Desde el 26 de octubre de 2023, Diego “N” se encuentra en prisión.

De acuerdo con Valeria Mondragón, la abogada responsable del caso, el proceso jurídico en contra de Diego “N” es histórico, pues es el primer caso en México donde se busca castigar la modificación de imágenes con Inteligencia Artificial por violentar los derechos de las mujeres.

Sin embargo, más de un año después exigiendo justicia, las estudiantes afectadas han tenido que enfrentarse a la falta de perspectiva de género en el sistema mexicano y a las constantes trabas para luchar en contra de la impunidad. Y es que, de acuerdo con un juez, no hay elementos suficientes para demostrar la culpabilidad de Diego “N” en el delito contra la intimidad sexual de dos de las víctimas.

A pesar de las 20 mil imágenes alteradas, el hallazgo de casi 170 mil fotografías y 20 mil videos por parte de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México; según el juez, no hay evidencias suficientes. A pesar de que se demostró que el 40% de las fotografías en posesión del presunto responsable eran de alumnas del IPN, no hay evidencias.

A pesar, incluso, de los testimonios de las estudiantes que alertaron a las autoridades sobre un canal de venta y reproducción de contenidos no consensuados, el juez responsable del caso no consideró que hubiera suficientes pruebas. ¿No le parece absurdo que las personas responsables de impartir justicia (como el cargo lo indica) no contemplen ni siquiera la posibilidad de involucrarse más allá de lo que ve su machismo?

Como si eso no fuera suficiente, la audiencia inicial de una tercera víctima, programada para este lunes 9 de diciembre, fue reprogramada para los últimos días de enero bajo el argumento de que la defensa no había estudiado la carpeta de investigación completa. ¿Cómo se puede garantizar el debido proceso para las víctimas cuando el sistema completo está fracturado por negligencias?

¿Cómo hacemos entender a las autoridades, instituciones y organizaciones sobre la importancia de implementar una perspectiva de género en cada proceso que aborde la violencia (digital o de cualquier tipo) en contra de las mujeres? Resulta urgente una capacitación sobre el tema para jueces, juezas y todos los cargos que se relacionen con la procuración de justicia.

Es imperativo que se considere la gravedad de los delitos y las sentencias correspondientes más allá de “las evidencias suficientes”, porque la investigación es clara y las pruebas recopiladas son una mínima muestra de lo que podría representar una red criminal mucho más grande.

Dejar las cosas “para enero” o para cualquier otro momento lejos del presente no es más que complicidad con la violencia hacia las mujeres. Tal vez, en los propósitos de año nuevo, el sistema pueda dedicarle una uva a dejar de proteger a los agresores y poner en primer lugar las necesidades de las víctimas.

¿Y si empiezan hoy?

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