Nuestras siete de siete
En opinión de Lorena Elizabeth Castillo
En estos días ha sido común escuchar las expresiones “tres de tres”, “cuatro de cuatro”, “seis de seis”, etcétera, en alusión al voto “en cascada” o “encadenado” para lograr tanto la mayoría calificada en los congresos, federal y estatales, como la mayor cantidad de cargos públicos, con el propósito de alcanzar la mayor gobernabilidad posible, para los gobiernos que surgirán de la elección del próximo 2 de junio.
“Pedir no empobrece”, dice la sabiduría popular y, por el contrario, cumplir las expectativas creadas en las campañas en busca del voto, sin duda, resulta altamente benéfico para la gente. Por ello es que, incidiendo en la reiterada petición de salir todas y todos a votar el próximo domingo, en este espacio tenemos también nuestra particular petición, a las futuras administraciones, para que cumplan “siete de siete” en materia de la erradicación de la violencia contra niñas, adolescentes y mujeres.
Para erradicar dicha violencia y su expresión más trágica que es el feminicidio, los futuros gobiernos de México, deben tomar medidas eficaces y contundentes que fortalezcan las acciones ya iniciadas por algunas de las administraciones actuales. Como se puede ver, son temas en los que hemos insistido en este espacio con obligada reiteración.
Por todas estas razones es que presentamos aquí nuestras peticiones “siete de siete” que constituyen, además, los reclamos de miles de mujeres de todo México:
1. Implementar políticas públicas y programas de prevención que promuevan la igualdad de género y la erradicación de la violencia contra las mujeres.
2. Fortalecer las leyes y garantizar su cumplimiento para castigar de manera ejemplar a los responsables de feminicidios.
3. Mejorar los sistemas de justicia para asegurar una pronta y adecuada investigación, proceso y sanción de los casos de feminicidio.
4. Otorgar atención integral a las víctimas, incluyendo servicios de atención psicológica, jurídica y de salud, así como medidas de protección y acompañamiento.
5. Sensibilizar a la sociedad en general sobre la gravedad de la violencia de género y la necesidad de prevenirla y combatirla.
6. Promover la participación de la sociedad civil y de organizaciones de mujeres en la prevención y erradicación de la violencia de género.
7. Mejorar la coordinación entre las diferentes instancias de gobierno y entre los actores involucrados en la atención de la violencia de género.
En conclusión, en el catálogo de expectativas creadas por candidatas y candidatos, fueron una rara excepción aquellas propuestas que integraron estas “siete de siete. Por lo tanto, es urgente que los futuros gobiernos emprendan acciones integrales y coordinadas que aborden las causas estructurales de la violencia de género y garantizar así protección y justicia para las mujeres víctimas de violencia.