Los campesinos acusan que la autoridad ha olvidado el agro
Señalamiento de la Central Campesina Cardenista en Morelos
El Legislativo recibe 600 millones de pesos; el campo, sólo 80
Kevin Salgado 
La LV Legislatura del Congreso del Estado de Morelos, abandonó al campo morelense, así lo confirmó el secretario general de la Central Campesina Cardenista en Morelos (CCCM), Humberto Sandoval Zamora.
Señaló que los diputados de la legislatura en turno, han dejado en el olvido a los productores campesinos, ante el escaso presupuesto que le destinaron al sector agrario.
Cada año, han insistido a los diputados de manera constante, que destinen un mejor recurso para lograr un campo morelense productivo, rentable y sustentable, pero han hecho caso omiso con ninguna respuesta favorable, “nos han dado migajas”, aseveró Humberto Sandoval Zamora.
El sector agrario se encuentra en una línea delgada, donde corre el riesgo de que cientos de hectáreas que están destinadas para el campo, ya no sean trabajadas en sembradíos y cultivos, un panorama de incertidumbre por el abandono y la indiferencia de las autoridades.
El poder legislativo tiene un presupuesto arriba de los 600 millones de pesos anuales, mientras que al campo sólo le dan 80 millones de pesos, de tal modo que, lo califican como una burla hacia ellos.
Esperan que los legisladores reiteren su compromiso, cuyo sentido es, que se destine un mejor recurso, para cubrir las principales necesidades para el sembradío en el estado de Morelos.
A nombre de los productores de alimento y campesinos morelenses, el secretario general de la CCCM, exige a la siguiente legislatura, que el Congreso local priorice las necesidades que está padeciendo el sector agrario y dictamine a su favor para lograr un avance significativo, no solo para su producción, también para la economía de la entidad.
Piden que se ejecuten soluciones para reforzar el campo, atender las pérdidas que se tienen por la sequía, por la falta de recursos y el problema de la escasez del agua.
Por último, señalo que vivir y trabajar en el campo, hoy en día es sinónimo de incertidumbre, inseguridad, en donde el Poder Legislativo ha desvalorizado su trabajo y no se han empeñado para beneficiar a los productores campesinos.
