La pizzería “Marco Polo” agrede a artesanos, dicen
Víctimas acusan que el negocio se apropió de la calle
Kevin Salgado
Artesanos morelenses denuncian presuntas amenazas por parte de los dueños del restaurante Marco Polo, a causa de que el Ayuntamiento de Cuernavaca les permitió “adueñarse” parte de la banqueta en el centro de la capital morelense.
De acuerdo con el artesano Arturo, el permiso que otorgó el gobierno municipal al restaurante para instalar la estructura metálica en la vialidad pública, arrebató el espacio de los pintores y ha afectado la comercialización de sus artesanías hasta en un 50 por ciento.
Por lo que, pidió al Ayuntamiento Capitalino a tomar cartas sobre el asunto para actuar ante esta situación conflictiva e intervenir en las agresiones que reciben, y principalmente a retirar la estructura metálica del restaurante para recuperar el espacio público a los pintores y artesanos.
Señaló que, la autoridad municipal prefiere vender parte de la vialidad en el centro de Cuernavaca, para llenar sus bolsillos de dinero.
“Nosotros también pagamos, pero a lo mejor ellos les dan mucho más”, expresó
A pesar de las manifestaciones de los artesanos y pintores para exigir que la estructura metálica sea retirada, el espacio todavía es utilizada por la construcción de metal, que ha sido cambiada y modificada con el nombre de Marco Polo desde hace seis meses.
Señaló que, esto impide que el turismo local o extranjero transite en la misma banqueta, lo que impide que los visitantes se detengan a observar y comprar su mercancía, ya que, dicha estructura estorba el paso y la visibilidad de los puestos de los artesanos.
Indicó que, este problemas comenzó con el restaurante “Café Alondra”, un negocio ubicado a un costado del restaurante Marco Polo, por esta razón y la saturación de estos espacios ocupados, temen que los artesanos sean retirados, con la excusa de que ahora ellos “estorban la vía pública”, para que circule la ciudadanía.
“Este lugar era de los pintores, pero como el gobierno municipal quiere dinero ya le vendió al restaurante Marco Polo”, agregó.
Ante esta situación que perjudica la comercialización de sus artesanías y de inconformidad por apoyo a los pintores, piden que se le dé prioridad al consumo local y a la actividad económica de muchas familias morelenses, ya que, diversos artesanos llevan años instalados en el centro histórico de Cuernavaca.
