La acusan de secesión; Harlem ¨N¨ se defiende
La defensa interpuso un recurso de apelación; argumenta ¨irregularidades¨ en el proceso
Cuautla, Mor.- Un recurso de apelación fue interpuesto por la defensa de la maestra Harlem “N”, quien fuera sentenciada a tres años de cárcel (por el delito de discriminación, en contra de una alumna de la escuela secundaria “Cuitláhuac”, ubicada en la colonia Otilio Montaño, de Cuautla).
Los sucesos ocurrieron el pasado 28 de septiembre, sentándose un precedente -por primera vez- en el país; nunca se había presentado un caso similar.
El abogado de la causa, Elías Pichardo Arias, informó que, debido a diferentes irregularidades observadas durante el juicio oral, que llevó al Tribunal de Enjuiciamiento determinar el fallo, es que se estableció este recurso de apelación (al no haberse presentado pruebas contundentes sobre el delito de discriminación o bulling).
Sostuvo que las pruebas que se presentaron para que los jueces de la causa dictaran el fallo en contra de Harlem; fue nada más por “dichos” (tanto de la afectada como de los testigos que fueron presentados por la Fiscalía General del Estado).
Dijo que, conforme a la Ley, pueden presentar una revisión del caso, debido a que se considera que se presentaron anomalías que en su momento serán detalladas.
Aunque el abogado de la profesora no confirmó, extraoficialmente se habla de que el caso sí presentó anormalidades, luego de que las acusaciones de parte de la madre de la menor, quien presuntamente sufrió daño psicológico y hasta una parálisis facial.
Según algunos maestros (que conocen del caso y del conflicto que se dio al interior del plantel educativo), hubo un problema extramarital entre la maestra sentenciada, la entonces directora de la escuela secundaria y un profesor.
Dado el conflicto que se registró, según los profesores, se puso un problema directo entre la ahora exdirectora y la maestra Harlem: “quien de por sí es especial en su manera de ser”.
Pichardo Arias aseguró que la menor no dio fechas concretas de las agresiones, además de que, al preguntarle fecha en que presentó la parálisis facial, la estudiante ofendida tampoco supo decir cuándo la sufrió y el tratamiento médico que recibió para recuperarse.