¡Inflación! ¿El peor de los males?
En opinión de José Román
Cuando La economía sirve a la gente, (al pueblo), hay prosperidad. Cuando la gente sirve a la economía (al gobierno), hay esclavos y se multiplican los pobres.
Se anuncia una inflación de mas de 7% y se culpa por parte del presidente a la pandemia y a la economía mundial y a otros factores, pero no se atreve a mirar la parte de causa que le corresponde a sus actos como líder de la nación. Tampoco dice que la inflación de nuestros socios principales (EU y Canadá) está a la mitad de la nuestra. Todos son culpables, menos el gobierno y sus actos. Esa negativa perjudicial a la objetividad en problemas que en mi opinión superarán con mucho al final del año el 8% es algo obvio y como consecuencia de una falta, al menos en gran parte, de un control eficiente del mercado y sus reglas y de los ataques al sector privado que han hecho que las inversiones fuertes y valiosas, generadoras de empleo sean escasas, cuando por la cercanía a EU deberían ser motivo de un gran desarrollo en la recuperación del mercado mundial.
Es en suma la avalancha de varios males los que aquejan a nuestra economía, pero la principal es el propio gobierno, generador principal de la inflación, porque de él dependen los precios de la materia básica en que se sustenta cualquier economía en el mundo. Veamos porqué: Sube la gasolina, el gas, la luz, las casetas de las autopistas por decir solo 4 de los elementos mas impactantes sobre cualquier actividad. Todos estos precios y su manejo lo determinan el gobierno y va acorde a las medidas que tome como se provoque la reacción de las empresas, desde la mini hasta la macro. Todo artículo o actividad lleva implícito el uso de energías y se mueve a través de este medio. Si los insumos vitales controlados por el gobierno suben, todo va a subir de precio o sencillamente, al no existir una correlación entre lo que cuesta el elemento primario mencionado y la actividad o venta, cierra el negocio y viene otro problema mas grave todavía que es la escasez. AMLO vivió los problemas inflacionarios del siglo pasado y sufrió o supongo debió haber sufrido la consecuencia cuando la inflación llegó incluso a un porcentaje superior al 150%. Hubo suicidios, quiebras y la economía, el peso se valuó en millones para comprar un Vochito o un NISSAN usados y viejitos. Las prendas, aparatos electrónicos, la gasolina, el gas, etc., casi día a día o semana a semana se tenían que modificar al alza los precios y como consecuencia llegó el momento en que como en Venezuela, su admirada Venezuela de AMLO, comenzó una brutal carrera en la que perdieron los salarios y triunfaron las alzas de los precios de las cosas. Tarde entendió el gobierno de aquel entonces su grave error de comenzar a decretar por orden presidencial los precios de las cosas, porque entonces hubo escasez. Afortunadamente no fue tan grave como la de Venezuela, pero recomponerla llevó sangre sudor y lágrimas y como siempre, las víctimas fueron los más pobres.
El Gobierno al ahuyentar la inversión carece de capital necesario para sustentar su actividad y los capitales huyen en busca de dos cosas: Seguridad y utilidades. Si AMLO está al frente de la Nación y México compite con otras naciones en desventaja, el dinero, es decir los capitales se van donde no existe ese riesgo de ser satanizados y amenazados y eso es lo que silenciosamente ha sucedido en México. Todo comenzó con el aeropuerto del DF que provocó el primer síntoma de desconfianza y luego siguió con más empresas, como la cervecera del Norte del País que también se fue y canceló sus casi 5 mil empleos directos que detonarían, más los indirectos.
Al no haber inversión suficiente, tenemos a la vista carencias que tendremos que pagar: escasez, inflación, desempleo y aumento de la economía informal. Al subir el salarió mínimo AMLO no consideró que no solo es el salarió el que incrementa porque aunado a ello sube la cuota del IMSS, del Infonavit, de las vacaciones, del aguinaldo, del agua, etc. Ahora súmele el incremento de precios a la luz eléctrica y la gasolina y el dólar que son elementos vitales para mover la economía del país. ¿Cree Usted que con aumentos en el año superiores al 30% de la luz y el gas, más el alza superior al 20% de los salarios los precios de los artículos se van a sostener? Obviamente, no. Por lo mismo en enero espere Usted un alza de precios que van a generar inflación muy superior a 7.5% actual que se dijo en este mes. O el comerciante en general alza los precios para ajustarlos a la realidad, o se rezaga y quiebra en la mayoría de los casos, lo que obviamente no va a suceder, es decir, por principio no va a cerrar, va a incrementar y ajustar a su nueva realidad los precios y cuando el gobierno reniegue o se oponga, la otra realidad se le va a presentar: La escasez y la inflación. Consecuencia, los pobres serán mas pobres y habrá pobres gracias en gran parte a una mala dirección de la economía. Cuando la economía se maneja con los pies, la barriga paga el precio.