Fraccionamientos traen desaparición de tierras para la siembra de cultivos
Cuautla, Mor.- Cada día la mancha urbana e va ganando terreno a las tierras productivas, y se puede ver que fraccionamientos ofr5ecen la venta de lotes, o las empresas de construcción venden departamentos en lugares en donde antes se podía ver la milpa, las calabazas o el pepino, hasta la caña de azúcar, relató Miguel Guzmán Orihuela campesinos de Cuautla. Manifestó que ahora se siembran varillas, tabiques y cemento, en lugar de las semillas tan necesarias para la alimentación.
Hasta hace unas décadas, el cerro La Piaña, en el municipio de Ayala, era conocido por ser el lugar en el que Pablo Torres Burgos, iniciador del movimiento maderista en Morelos y quien junto a Emiliano Zapata planeó el levantamiento armado contra Porfirio Díaz, fue capturado por las tropas federales para posteriormente ser asesinado. Aún hoy, subir el cerro es una experiencia mística que devela un paisaje que se niega a transformarse con el tiempo, pero que la fuerza humana y la fuerza de las máquinas pesadas ha convertido en un fraccionamiento el lugar, detalló Mirna Vázquez ejidataria de Olintepec.
Dijo que al caer la tarde, las retroexcavadoras bajan del cerro con la misión cumplida: abrir nuevos caminos entre los árboles para la construcción de nuevos departamentos. Por la orilla, los troncos y las ramas yacen en el suelo como cadáveres que nadie ha venido a reclamar.
Expresó que aunque el cerro La Piaña no está ubicado en un área natural protegida, nadie puede negar el daño que ha causado la construcción de este complejo a la naturaleza primigenia del lugar, caracterizada por árboles de copas altas e insectos de gran tamaño.
"Definitivamente, hay un impacto ambiental, pero ya tiene rato que dieron esos permisos. Las autoridades deberían implementar medidas, que no son preventivas, sino de resarcimiento, de acuerdo con el reglamento de ecología del municipio, para reforestar los árboles que talan", reveló Manuel Martín Torres, Director del Área Natural Protegida del Río Cuautla.
La falta de un marco legal robusto y su aplicación efectiva en los ayuntamientos destaca como un talón de Aquiles en las acciones encaminadas a la conservación de las áreas naturales. De acuerdo con Manuel Torres, muchos de los reglamentos de ecología no están aprobados o publicados, lo que representa un vacío legal que se traduce en terreno fértil para la expansión urbana sin restricciones.
Cuautla sigue siendo uno de los ejemplos más notables para ilustrar la pérdida de áreas naturales mientras la expansión urbana avanza. No sólo en el río, sino también en otras zonas, como el pueblo de Santa Inés. "Hay varios casos. Tenemos Casas Geo, en Santa Inés, donde había tierras de primera e incluso se les complicó mucho construir debido a la cantidad de agua que hay ahí. En realidad, casi todos los fraccionamientos han violado los reglamentos", afirmó Torres.