Ejidatarios refuerzan el rechazo a termoeléctrica
Por ende, el mandatario nacional, AMLO, no podrá inaugurar la obra en diciembre próximo
Los amparos no han sido solucionados; las obras están frenadas en Huexca, municipio de Yecapixtla
Jorge Rafael Sánchez
Cuautla, Mor.- El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, no podrá inaugurar la termoeléctrica, ubicada en Huexca, municipio de Yecapixtla, en diciembre próximo.
Antes, se tienen que solucionar los amparos, que tienen frenadas las obras de conclusión del acueducto.
Así lo informaron los ejidatarios. Hasta este momento, las autoridades federales y estatales no tienen el permiso de éstos, que están organizados en un plantón -en las inmediaciones del puente de San Pedro Apatlaco-.
El próximo 25 de septiembre se llevará a cabo una audiencia constitucional, en donde adelantaron que, lejos de retirar los amparos que tienen (para impedir la conexión de 150 metros lineales de tubería), se amplía la demanda respecto a los actos reclamados, según lo señala un juez de distrito radicado en el juicio de amparo 1595/ 2019 –V.
Al respecto, el presidente de la Asociación de Usuarios del Río Cuautla (Asurco), Rogelio Plasencia Barreto, dijo que hasta este momento no ha sido posible convocar a la asamblea para tratar el tema entre los ejidatarios, debido a la contingencia del covid-19, y de que las autoridades en materia de salud no permiten reuniones masivas.
Añadió que se ha discutido ese tema por separado con los comisariados ejidales de la zona sur de Cuautla, para tratar de posibilitar el retiro de los amparos y del plantón que se tiene en Apatlaco, lo cual no ha sido posible.
Por lo que la negociación que se tenía avanzada con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y otras dependencias federales y estatales se encuentra detenida.
El ayuntamiento de Cuautla podría hacer la negociación de manera directa. Por su parte, el presidente del comisariado ejidal de Cuautla, Jesús Ramírez Chávez, contradijo al dirigente de Asurco, al asegurar que el alcalde es quien tiene la última palabra.
Recordó que la planta tratadora se encuentra dentro de la demarcación de Cuautla.
Explicó que, al no tomar una sola gota de agua del río Cuautla, los ejidatarios no pueden entrometerse en asuntos que le competen sólo al ayuntamiento cuautlense. “En este caso, se invalidarían los amparos porque el agua no es corriente del río Cuautla, sino de los desechos o aguas residuales de drenajes del municipio y algunas otras localidades aledañas”.
