CUERNAVACA, CUAUTLA Y JOJUTLA

En opinión de Juan Salgado Brito

CUERNAVACA, CUAUTLA Y JOJUTLA

El acelerado crecimiento poblacional y la expansión urbana constituye uno de los más grandes retos para los tres órdenes de gobierno;! los problemas por la deficiente e insuficiente prestación de servicios públicos y la escasez de recursos para obras de infraestructura y equipamiento urbano tienden a generar ambientes de inconformidad y conflictividad social sobre todo en temas muy sensibles como la inseguridad, desabasto de agua potable, deterioro de carreteras y vialidades urbanas, alumbrado público, transporte, recolección y destino final de la basura, etc; problemas todos estos que si bien compete en su mayoría atender y resolver a los ayuntamientos, solos no pueden y es imprescindible el apoyo de la federación y del Estado, además de políticas estratégicas de participación ciudadana que sin duda exigirá a las autoridades mayor transparencia, austeridad y rendición de cuentas.

Cuernavaca y su conturbación con Jiutepec, Temixco, Emiliano Zapata, Xochitepec y Huitzilac., Cuautla con Ayala, Yecapixtla y Yautepec, así como Jojutla con Tlaquiltenango, Tlaltizapán y Zacatepec, que integran en la realidad las tres zonas metropolitanas de Morelos, representan todo un reto pero también una gran oportunidad para el desarrollo regional sabiendo y conociendo de sus potencialidades en los distintos aspectos de crecimiento económico y del desarrollo social con proyectos de largo alcance sobre el turismo, la industria, el sector agropecuario, comercio y otros muchos que pueden darle a Morelos la dimensión en calidad, competitividad y productividad a la par de otras entidades de similar al tamaño.

En este gran reto y la oportunidad de crecer y ser más grandes,  sin duda,  bien pueden articulares esfuerzos y recursos, lo mismo del sector público, social y privado para responder a las necesidades y exigencias de una sociedad a la que parece pudiera agotarsele la paciencia ante la espera de soluciones a la creciente problemática que agobia a las familias y a la comunidad en general, lo cual de no atenderse pone en riesgo la paz social y la estabilidad.