Cuauhtémoc B. denuncia negligencia médica en su peor lesión como futbolista
Se lanzó Vs. el Dr. Serrano, actualmente en Toluca y selección Nal.
Esta semana, se cumplieron dos décadas de la peor lesión que padeció el actual gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, durante su carrera como futbolista.
Las imágenes de aquel partido, del 8 de octubre del 2000, que sacudieron a todo México y tuvieron alcance internacional, cuando el seleccionado nacional jugó en el Azteca contra Trinidad y Tobago (donde se dio la criminal entrada de Ancil Elcock contra el 10 del Tri) aún son recordadas por todos los futboleros que la atestiguaron y, desde luego, por la víctima, de apellidos Blanco Bravo.
En entrevista concedida a la prensa nacional especializada, el hoy mandatario morelense se lanzó esta semana en contra del doctor José Luis Serrano quien, tras practicarle una revisión entonces, le dijo que no tenía nada.
Serrano hoy trabaja como médico en el club Toluca y también es auxiliar en la selección mexicana, actualmente bajo el mando del argentino Gerardo, "El Tata" Martino.
Según el amargo recuerdo de Cuauhtémoc, fue hasta retornar a España en aquel 2000, con su entonces club, el Valladolid, cuando se enteró de la gravedad de la lesión por la que estuvo deprimido y llorando muchas veces, al considerar que su carrera había finalizado, según su propio recuento.
Con la idea del diagnóstico médico del entonces médico de la selección mexicana, de que quizá la lesión no era tan grave, fue en Valladolid donde tras practicarle los exámenes correspondientes, Blanco se enteró que se trataba de una grave rotura de ligamento cruzado anterior, ligamento lateral y menisco, que lo dejó meses fuera de la actividad.
Según ha recordado el exfutbolista, durante su periodo de convalecencia, del mundo futbolístico mexicano, sólo fue visitado por Enrique Meza, entonces, entrenador nacional.