Casona de García Luna en Morelos, sólida evidencia durante su juicio

En el capítulo del miércoles de esta semana en el juicio en Nueva York a Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad de México, por sus presuntos vínculos con grupos del narcotráfico, la llamada Casa Blanca en Morelos, propiedad del exfuncionario, salió a relucir y se mantuvo como una prueba fundamental de la riqueza del personaje.

La Fiscalía mostró al juez una serie de fotografías encontradas en una computadora de Genaro García en 2019.

Imágenes de bienes inmuebles, automóviles, motocicletas e incluso obras de arte fueron presentadas para intentar demostrar la riqueza inexplicable del hombre fuerte de la seguridad en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa.

La defensa del famoso acusado, sin embargo, argumentó que el que alguien posea fotografías en un dispositivo electrónico no implica necesariamente que sean de su propiedad.

El juez estuvo de acuerdo, y pidió a la parte acusadora ofrecer pruebas en las que se constate fehacientemente el vínculo de propiedad con el procesado.

De esta manera, las fotos que se mantuvieron como evidencia fueron justamente las del inmueble propiedad de García en Morelos. Se dijo que es una casa suya en Cuernavaca, y aunque no fue aclarado, aparentemente se trata de la que en realidad está en el municipio de Jiutepec.

La Fiscalía la nombró como la "Casa Blanca" (ese mote se ha dado a ese bien inmueble en Jiutepec desde hace años), adquirido en el tiempo en el que supuestamente el entonces responsable de la Seguridad nacional era sobornado con millones de dólares por el Cártel de Sinaloa.

Las imágenes de la residencia en suelo morelense fueron extraídas de la computadora incautada al exservidor público mexicano cuando fue capturado en Dallas, Texas, en diciembre de 2019.

La Casa Blanca en Morelos, así, se convirtió el miércoles en una prueba sólida del dinero aparentemente malhabido que se busca probar en este proceso.

Se mostraron las habitaciones del complejo, que ha sido valuado en aproximadamente 9 millones de pesos, a fin de evidenciar la lujosa vida de García Luna.

Esta misma semana, en otra de las audiencias en la Corte en La Gran Manzana, se dio a conocer que en Cuernavaca fueron adquiridas diferentes propiedades y construidos algunos inmuebles, fruto del dinero obtenido por sobornos del alto funcionario enjuiciado en Estados Unidos al exgobernador priista de Coahuila, Humberto Moreira, y varios de sus subalternos.

El dinero para tales fines surgió, según las acusaciones de Héctor Villarreal Hernández, exsecretario de Finanzas en aquel gobierno coahuilense, de pagos al, en ese entonces, secretario de Seguridad del país a Moreira, por sus labores de negociación con el periódico El Universal, para recibir millonarias cantidades en favor de la imagen del funcionario federal.

A decir de los dichos de Villarreal, los montos que Moreira y su equipo se adjudicaron por esa presunta actividad delictiva llegaron a contabilizarse en alrededor de 200 millones de dólares. El antiguo amigo del priista, hoy su delator, desveló que él personalmente se quedó con alrededor de 2.5 millones de la divisa norteamericana. Ese dinero tuvo en el lavado de dinero uno de sus principales destinos.