Uriel Carmona ¨viola¨ derechos de mujeres, denuncia Marco Zapotitla
Al impedir la presencia en el Pleno de las titulares de las fiscalías de feminicidios y Antisecuestro y CJM
Dichas funcionarias iban a recibir un reconocimiento, empero ¨no se les dio el permiso¨, señaló el diputado
Marcos Zapotitla Becerro, presidente de la Comisión de Igualdad de Género del Congreso, acusó al fiscal general, Uriel Carmona Gándara, de “violentar” los derechos de las féminas, al impedir la presencia, en el Pleno (este domingo), de las titulares de las fiscalías: Investigación y Persecución del Delito de Feminicidio (Fabiola García Betanzos) y Especializada contra el Secuestro y la Extorsión (Adriana Pineda Fernández), así como el Centro de Justicia de la Mujer (CJM).
Dichas funcionarias iban a recibir un reconocimiento; en torno a eso, el constituyente adujo que, en términos generales, “no se les dio el permiso”. Reiteró que, en la comparecencia de aquél, se le exigió destinar más recursos a estas instancias. Los asesinatos contra mujeres se “incrementan” y no hay suficiente personal, para dar curso a las indagaciones.
De igual forma, dijo que el fiscal general reveló que el Tribunal Superior de Justicia no ha designado a las juezas (en materia penal), que tienen que prestar sus servicios en el Centro de Justicia de la Mujer. En ese sentido, aprovechó la presencia, en el Congreso, del magistrado Miguel Ángel Falcón Vega, para que este reclamo llegue a los oídos de la presidente, María del Carmen Verónica Cuevas López, a fin de “agilizar” estas tareas.
Por ahora, el parlamentario se ciñó a denunciar que dicho centro es “un elefante blanco”.
Además, agregó que se etiquetó, desde el Legislativo, un presupuesto en pro de una casa de transición -que permita salvaguardar la integridad de las mujeres que enfrentan situaciones de “violencia extrema”-. Sin embargo, hay “mucho por hacer”. Debemos garantizar el respeto a los derechos de las mujeres. Y, sobre el paro de este lunes, anunciado por grupos feministas, admitió que es “bienvenido”; es un “acto de concientización”.
Recordó que en 1974 se reformó el precepto cuarto de la Carta Magna; en julio de 2011, se elevó el derecho humano de “género”, lo cual no se ha logrado. La “violencia”, en este sentido, sigue en ascenso. Hay discriminación en distintos rubros, como en el empleo.
Se han conquistado derechos; “no podemos retroceder”. Las niñas son “fundamentales”. Deben ser escuchadas y “valoradas… Cambiemos la historia”; una de cada 10 no sabe leer. El 25 por ciento ocupa lugares en los parlamentos. El trabajo doméstico no es “bien remunerado”, apontocó.
Con base en el SESNSP, en 2019, hubo 976 asesinatos contra féminas. Ratificó el compromiso de generar acciones -para diezmar el miedo y la segregación-. Propuso una sinergia entre instancias.
Al retomar el tópico del Parlamento de Mujeres, describió que se implementaron los temas: participación ciudadana, justicia y derechos humanos, educación; medio ambiente, salud y bienestar.
Agregó que acudieron mil féminas. Y, ergo, anunció estas iniciativas: reformar la ley de salud, para crear un departamento sobre la violencia obstétrica, puesto que aún existe un trato ofensivo durante el parto, que atenta contra la integridad física. Se necesita una “atención digna”.
Finalmente, se producirán cambios en la ley del Servicio Civil, para que se adhieran disposiciones de “solidez” familiar. La enseñanza es el medio por el cual se transmite conocimiento; por ende, una más: en torno a la ley de educación, se pedirá, como un requisito indispensable, que en el ingreso o egreso de una escuela, el alumno apruebe un curso virtual con perspectiva de género.