Repaso - Asignación de horas por rúbricas: ¿por norma o por palanca?

Entre los saldos que heredó la actual administración del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), está el asunto de los maestros a los que se les asignó horas por rúbricas de desempeño. Hace algunos meses esos docentes, apoyados por la representación sindical, exigieron el pago de sueldos pendientes. Incluso llegaron a manifestarse frente a las oficinas de la Subsecretaría de Ingresos y, ese mismo día, también lo hicieron frente a Casa Morelos, según los reportes periodísticos del 16 de octubre del año pasado.

¿Cuál es el sustento normativo para recibir horas adicionales bajo el concepto de asignación por rúbricas? Es una pregunta, según entiendo, que no ha tenido respuesta convincente. O esas horas no están contemplada reglamentariamente o no les interesa a las autoridades correspondientes aclararlo ampliamente.

 Ese tipo de nombramientos no debe confundirse con las horas adicionales que se obtienen por concurso de oposición. ¿Estoy en lo cierto? Yo lo infiero, atendiendo a los testimonios que recibo por parte de maestros que han participado en dichos concursos o exámenes.

Uno de tales testimonios, cuya identidad del informante me reservo, me lo explican más o menos así:

“Dentro de las escuelas en las que he estado, en las que para obtener horas adicionales por lo general he estado dentro de los seis primeros lugares, las horas me las han asignado donde han querido. En contrario, al abrirse algunas vacantes, los directivos tenían la libertad de otorgarles horas por rúbricas a quienes consideraban aptos, pero se sabía que actuaban por compadrazgo o nepotismo”. Además, se sospecha, en grado de total certidumbre, que esos dictámenes se emitían con la connivencia de algunas autoridades, avalados convenencieramente por las delegaciones sindicales.

Me informan también que las horas por rúbricas se desempeñan bajo la modalidad de interinatos, porque presuntamente no existen las condiciones para que fuesen de base. Pese a esa limitante reglamentaria, se cree que se están basificando. ¿Por qué? ¿Por quién? Es tema que difícilmente se aclarará, porque todo hace suponer que en ello subyace toda una cultura de la corrupción.

 Las suspicacias han estado a la orden del día. En una conferencia un maestro evaluado preguntó por qué al obtener un resultado considerado como bueno, no le dieron las horas de acuerdo con lo establecido por la ley. La respuesta fue que al basificarle las que tenía por rúbrica de desempeño, ya no podía obtener más horas.

Como se observa, todo se revuelve y parece que los criterios de asignación están supeditados a las componendas cupulares de siempre. Cuando vino a Morelos el conferencista youtuber Jaime Uchía, al preguntarle sobre el tema manifestó que desconocía ese proceso de rúbricas. Dijo que en ninguna de las entidades federativas que había visitado había escuchado tal cosa, por lo que se interpretó que probablemente fue un acuerdo local. ¿Se puede? ¿Fue aprobado por la federación, en el entendido de que los recursos para el pago de sueldos están controlados rigurosamente desde allá?

En todo ello se manejó la injerencia de la representación sindical para concretar dicho acuerdo, pero a todas luces fue irregular. Quizá por eso la federación no liberó los recursos para pagar los sueldos que dichos maestros han venido reclamando.

Con todo y que el problema aún no está resuelto, se me comunica que en las escuelas continúan renovando esas horas no ganadas mediante concursos de oposición, en tanto que muchos de los que fueron evaluados con resultados satisfactorios aún no pueden obtener lo que por derecho les corresponde. Siguen esas y muchas horas sueltas, me dicen, otorgadas discrecionalmente. Que eso esté ocurriendo, constataríamos que la corrupción en el sector educativo sigue a todo galope.

• De refilón

Me queda claro que el problema de la pésima administración y manejo de los recursos en el IEBEM se ha originado en administraciones anteriores. Culpar a Eliacín Salgado de la Paz de tanta porquería me parece que no sería justo. De todos modos, está obligado a transparentar lo que hace y las soluciones que busca. No la tiene fácil, mucho menos si entre su personal se duda de la presencia de desempeños honorables.

Por ejemplo, me ha llegado el rumor de que, en confabulación con alguien de la Sección 19 del SNTE, se está solicitando cierta cantidad económica para “ayudar” a aquellos empleados administrativos, que recientemente llevaron un curso de capacitación, para aprobar el examen que les permitiría obtener los estímulos fijados para esos casos. Estoy a punto de mencionar el nombre de la persona involucrada, pero me aguanto hasta que consiga más información al respecto. Seguramente la obtendré.

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