Observador político - Los millonarios de la nueva clase política
En opinión de Gerardo Suárez Dorantes
La legislatura 54 a un año de actividades está reprobada. Y esta calificación la otorgó el mismísimo Pepe Casas, este personaje que como dice una cosa dice otra. El dizque representante popular que se afilió a Morena semanas antes de ser candidato y ya como diputado se pasó a Encuentro Social y que después, decidió por cuestiones económicas y políticas irse al Partido del Trabajo, de donde fue corrido por su ex amiga Tania Valentina Rodríguez Ruiz, por pisarle sus negocios. Lo cierto, es que este Congreso da pena ajena. No les importa violar la ley mientras sus derechos políticos y económicos les favorezcan.
TRAICIÓN.- Un diputado o diputada es aquella persona nombrada por elección como representante en una Cámara de Diputados, que llegó al cargo por el voto y la confianza que le confirió la ciudadanía. Sin embargo, hoy definir a un legislador es sinónimo de corrupción, enriquecimiento y traición. El ejemplo de ello, es lo que está sucediendo en la actual legislatura en donde sus integrantes, hombres y mujeres, una vez que concluyan su periodo de tres años saldrán con un enorme desprestigio que se están ganando a pulso, con calificativos de traición por su actuar pero lo que nadie les quitará, es que serán la nueva clase política que saldrá millonaria tan sólo en un periodo de tres años.
¿Qué se requiere para convertirse en diputado local?
Los requisitos para ser candidato a diputado local son mínimos: Solo tiene que ser ciudadano mexicano por nacimiento en ejercicio de sus derechos civiles y políticos; tener veintiún años cumplidos el día de la elección; ser vecino del Estado, con residencia no menor de cinco años inmediatos anteriores a la fecha de la elección. Es decir, no se requiere licenciatura, menos maestría o doctorado como ya lo solicitan en diferentes empresas del sector privado.
Y mientras diversos sectores de la población perciben diariamente el salario mínimo que con el incremento en este inicio de sexenio a 102 pesos –y 176 en la zona fronteriza- en Morelos, los legisladores morelenses perciben alrededor de seis mil 600 pesos diarios que hacen un global de alrededor de 200 mil pesos. A decir de los especialistas del tema y de los propios legisladores que así lo han reconocido, ellos perciben 70 mil pesos de sueldo más los más de 120 mil de dietas y comisiones, y demás gastos de representación que perciben. Esto equivale a que al año alcancen alrededor de 2 millones 400 mil pesos y en los tres de su gestión la nada despreciable cantidad de 7 millones 200 mil pesos que los colocarán como los nuevos millonarios políticos de Morelos.
No de en balde se han preocupado por la lucha de los espacios de representación al interior del Congreso del Estado, entre Tania Valentina Rodríguez Ruiz y Alfonso de Jesús, tanto por la presidencia de la Mesa Directiva como de la Junta Política y de Gobierno, con sus respectivos grupos que se dicen democráticos, transparentes y honestos pero que en realidad tienen el objetivo común: administrar los 460 millones de pesos que tuvieron de presupuesto este año, un recurso elevado casi 200 millones de pesos porque disminuyó el número de legisladores y por el contrario, aumentó el recurso que utilizan este año. No conforme con ello, ya se están relamiendo los bigotes para volver a manejar recursos extra ofensivos en plena crisis económica que se vive en todas las dependencias gubernamentales tanto federales como estatales e incluso municipales. Y es que, las mujeres y hombres diputados, con sus respectivos asesores, secretarias, auxiliares, chóferes, así como el pago de luz, agua, teléfono y demás gasto corriente, 23 millones de pesos al año al pueblo de Morelos. Lo que para muchos es una grosería, una ofensa porque hay un pueblo pobre y un Congreso millonario.
GASTOS OFENSIVOS.- A un año de haber llegado al Congreso sus integrantes, están aprovechando estos millonarios recursos para auto festejarse, van con sus respectivos grupos, evidenciando la división y confrontación, gastan en “acarreados” a quienes los dotan de sus respectivos tortas y refrescos aprovechando su necesidad económica, contratan rutas para su traslado, además de contratar chínelos, músicas de banda, sonidos, escenarios que tapizan con luces y lonas gigantes para exponer su horrible cara tal y como sucedió en el zócalo de Cuernavaca con José Casas, quien tiró el dinero por la ventana, insisto, en plena crisis económica. ¿Quién audita al Congreso? ¿Quién revisa cuánto dinero gastan y en qué? Nadie, la Entidad de Fiscalización y Auditoría del Congreso es un elefante blanco que solo sirve como instrumento para perseguir y señalar a alcaldes y enemigos políticos como en su momento lo hizo el ex diputado local del PAN, Beto Mojica y por lo cual lo echaron de la Comisión de Hacienda. Lo que hacen diputadas y diputados es gastar de forma ofensiva lo que no es suyo, dinero público en actos personales en los que magnifican lo poco que han realizado en un año.
Lo único que ha quedado evidenciado es que atrás, muy atrás quedaron los principios, valores y la lealtad de los diputados incluso con sus propios partidos políticos, tal parece han quedado huérfanos porque no tiene madre. Atrás quedaron los militantes que los llevaron a obtener esa curul, aunque en el próximo año, estarán buscando el respaldo social porque la mayoría intentará no perder esa minita de oro que les representa la diputación y por lo tanto, no quedarán vivir fuera del presupuesto por lo que la reelección será la primera opción de la mayoría de legisladores. Y si no, que se lo pregunten a sus sucesores. Que por cierto, todos sin excepción, perdieron la elección.
Hoy, la traición es una constante en el Congreso, a tras quedaron los principios. Hombres y mujeres, por igual, solo con argumentos débiles y sin sustento señalan que son por “cuestiones personales”, y se van de un grupo parlamentario a otro, sin importar la ética política. Sin ideales, lo que para muchos ha sido una prostitución política y sin sanción de ningún tipo.
Email: gerardonoticias01@gmail.com
Twitter: @gerardosuarez73