Inclusión Educativa en la UAEM Aspirantes con discapacidad a Prepas: Programa de Inclusión UAEM

Para el Ciclo Escolar 2019-2020 hubo 16 aspirantes con discapacidad a las Preparatorias de la UAEM. Las sedes de aplicación del examen CENEVAL para ellos fueron en la Facultad de Artes y en la Facultad de Estudios Superiores de Jojutla. Y tuvo verificativo el 9 de junio. Ahí hubo presencia de personal del Programa de Inclusión Educativa y Atención a la Diversidad de la UAEM, para apoyar la aplicación con Ajustes Razonables de acuerdo a cada discapacidad específica.

Los jóvenes con discapacidad que se han presentado para ingresar a las Prepas de la Universidad son 10 Sordos, 1 con Hipoacusia, 3 con discapacidad intelectual, 1 con debilidad visual, y 1 con Trastorno de Atención e Hiperactividad (TDAH). De ellos, 7 Sordos han elegido ingresar a la Prepa 1 y el alumno con TDAH; uno con discapacidad intelectual y una alumna con hipoacusia a la Prepa de Técnico Laboratorista; 3 Sordos a Jojutla, uno con debilidad visual y uno con discapacidad intelectual; por último, un alumno con discapacidad intelectual a la Prepa Comunitaria de Tres Marías.

Los resultados que se dieron a conocer el 27 de junio en los medios de comunicación, indican que el resultado más alto obtenido por estos aspirantes fue de 74.25 y el más bajo fue de 17.5 puntos. Dos catalogados como Aceptados y el resto No Aceptados de los 16 aspirantes. A lo que tenemos que aclarar que el examen CENEVAL no está estandarizado para alumnos con discapacidad; más bien, por el contrario, con jóvenes in discapacidad. Y no es suficiente que los Ajustes Razonables se hagan solo en la aplicación del examen. Y nos referimos a la presencia de Intérpretes en Lengua de Señas Mexicana (ILSM), a la aclaración de preguntas, a la lectura de algunas y al tiempo ampliado concedido para responder dicho examen.

Anteriormente, se aplicaba un examen diferencial a los aspirantes con discapacidad, elaborado por el Programa de Inclusión de la UAEM. Pero un principio internacional de la Inclusión, desde la aprobación de las Normas Uniformes de la ONU, en 1994, se recomienda que no existan normas diferentes entre la población con discapacidad y la población sin discapacidad. Es preferible que sean las mismas normas para ambas poblaciones, porque en el fondo son la misma población en lo esencial, se trata en primer término de personas y en segundo término con o sin discapacidad. Y que dichas normas uniformes sean flexibles para que apliquen y no sean normas excluyentes, sino más bien incluyentes. Lo que hacen los países que han resuelto los exámenes masivos incluyentes, como Holanda, Canadá, Chile y Perú, entre otros, es que eliminan las preguntas que marcan diferencia con las personas con discapacidad y se quedan solo aquéllas que son compatibles para todos. Solo así sería posible aplicar las fórmulas de calificación final. De otro modo, sería injusto aplicarlas como si fueran aspirantes sin discapacidad. Esto sería la validación de los reactivos o preguntas. Faltaría aplicar ese examen válido a un número suficiente de población con y sin discapacidad, para obtener la confiabilidad del examen.

Hacer esta estandarización a nivel nacional por CENEVAL es extremadamente complejo. Es más factible hacerlo en el Estado de Morelos por la UAEM. Sería un examen de selección propio y no el de CENEVAL. Mientras eso ocurre hay que darles oportunidad a los jóvenes con discapacidad a que pasen a la fase del Propedéutico. El 22 de julio se inicia en el de la Prepa 1 y el 25 el de Jojutla. En ambos se requiere el apoyo de los ILSM para los Sordos. Por cierto, los 7 Sordos que van a Prepa 1 todos son egresados del CAM 6.

Estamos lejos de cubrir una cuota representativa de los estudiantes con discapacidad en Educación Superior universitaria. Entran 19 jóvenes con discapacidad a licenciatura, 16 a Prepa, son 35 de nuevo ingreso, más 117 ya existentes, son un total de 152 jóvenes con discapacidad. Son el 0.36% de la matrícula total de 42 mil uaemitas.