Frente a la insistente parálisis legislativa Solidaridad proactiva
En opinión de Mirna Zavala
Mirna Zavala
Con la puesta en marcha de distintos programas de las secretarías de desarrollo social, desarrollo económico y agropecuario se avanza en la reactivación económica tan necesaria en el estado. Efectivamente, distintas acciones empiezan a desglosar la derrama de apoyos para el fortalecimiento de las capacidades financieras no solo personales sino grupales en distintas ramas de la actividad económica. La capacitación para el trabajo proyectada desde el ICATMOR habrá de incentivar a cientos de personas en el mejoramiento de su actividad comercial o en el emprendimiento de alguna de ella, entre muchas más acciones.
Y es que las condiciones económicas prevalecientes van obligando a encontrar nuevos caminos de desarrollo, establecidos o alternativos, que permitan principalmente a los jóvenes a encontrar su lugar en el ámbito laboral. No solo las condiciones globales impactan en nuestra economía de manera significativa, también las propias generan dificultades. Al mes de febrero, según datos del INEGI en su último reporte del indicador global de la actividad económica (IGAE) las actividades del sector primario han sido las más afectadas, de ahí el alza que hemos visto en los precios de los productos de la canasta básica. El aumento en las actividades de los sectores secundarios y terciario es tan bajo que prácticamente se consideran sin cambio.
Con un entorno tan complicado resulta altamente mezquina la conducta insistente y obsesiva de legisladores más afectos a conservar sus intereses personales que mirar el bien de los morelenses. Hay tanto que resolver en la vida pública y es tan poca, por no decir nula, su disposición, que lo único que aportan es el desgaste y desprestigio de las instituciones con la consecuente desesperanza de la población. Un derrotero que solo lleva a la precariedad o a la ruina.
De ahí que la apuesta personal es la cercanía con la gente y la gestión de los diferentes programas de beneficio social ante una sociedad tan necesitada de ayuda y solidaridad. En ese camino seguiré transitando. Les saludo con afecto.
MIRNA ZAVALA
