Escala de Grises - Más de lo mismo

Durante un evento realizado en Expo Guadalajara, Pedro Kumamoto (regidor de Zapopan y líder del partido político Futuro”, anunció una alianza entre Morena, el PVEM, el PT y Hagamos en Jalisco para las elecciones del 2024. De acuerdo con él, la decisión se tomó con base en las coincidencias entre las distintas fuerzas que pretenden formar parte del proceso.

Pedro Kumamoto aseguró que el objetivo principal es eliminar a Movimiento Ciudadano de la competencia, dada la experiencia con Enrique Alfaro como gobernador del estado. Bajo la idea de construir un proyecto de cambio, la coalición —presuntamente— se enfocará en un “futuro de derechos”. ¿El discurso le suena familiar?

Como parte de su intervención, el funcionario aseguró que a lo largo de sus 10 años en el ambiente ha creado lazos, impulsado el cambio y nuevas formas de hacer política (vemos); por lo que contenderá para estar al frente del ayuntamiento de Zapopan.  La noticia, por supuesto, fue uno de los temas más populares durante el fin de semana.

Mientras la opinión pública se debatía entre las críticas y las felicitaciones, el nombre de la joven promesa de la política durante el 2015 se convirtió en tendencia y sigue dando de qué hablar hasta ahora. Henos aquí. Pero es que, a veces, las contradicciones son difíciles de ignorar.

El maestro en Políticas Públicas por la University College of London se mantuvo firme durante los primeros años de su trayectoria, cuando hizo historia y se convirtió en el primer diputado local independiente de la historia. Para el 2018, con la intención de promover candidaturas independientes, la organización dirigida por Kumamoto decidió transformarse en partido político estatal.

“Futuro” se fundó en el 2020 con el mismo discurso de transformación que caracteriza a las fuerzas políticas. Sin embargo, con el paso del tiempo y las decisiones tomadas por algunos integrantes del partido, las palabras suenan a más de lo mismo. “Poner fin al despilfarro, acabar con la corrupción y destruir las falsas promesas” formaban parte de las frases utilizadas por el joven Pedro.

¿Cuál es el futuro de las candidaturas independientes en México? ¿En dónde quedaron las propuestas? ¿Cuáles son las posibilidades para aquellas personas que pretenden no formar parte del sistema que tanto critican? ¿Se aplicarán los mismos principios que se promovían en la ley “sin voto no hay dinero”?

¿Qué podrá más en esta alianza? ¿La necesidad de sobrevivir bajo la ideología que lo llevó a la popularidad o la imposibilidad de rehusarse a cumplir los deseos y requisitos del partido hegemónico? De algo no nos queda duda: En este ámbito siempre puede más la conveniencia que las propias creencias.

Pedro Kumamoto aseguró que hay concordancias con los partidos; sin embargo, bajo la idea de respetar los derechos humanos de la población en Jalisco, no estoy segura de que Morena sea la mejor opción. Especialmente después de las múltiples violencias que se reproducen en contra de las víctimas de desaparición forzada o el impulso de la militarización a nivel nacional, por ejemplo.

El movimiento que pretendía demostrar que había nuevas formas de hacer política ahora puede clasificarse en el mismo círculo que el resto de los partidos políticos a los que tanto criticaba. ¿Será que resulta inevitable sumarse al sistema? ¿Pueden más las ambiciones profesionales que las necesidades de la población a la que se busca representar?

Lo que queda por ver es el resultado de la alianza; es decir, el enfoque y las acciones de Kumamoto y su partido durante las campañas y —en caso de resultar triunfadores— durante su gestión. Sumarse a quienes criticaba y empezar a negociar con los peces grandes puede traer grandes beneficios, pero ¿será ese el plan?

Ya veremos:

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