En el filo del olvido
En opinión de Carlos Morales Cuevas
La locomotora ruge sobre tus venas,
navega entre tu sangre,
corre sin dirección alguna.
Hay una epidemia de langostas,
plaga de recuerdos en el ojillo de esta aguja
por el que se ven las calles de tu desierto chedrón.
Nuestros huesos chocan,
se dejan escurrir bajo la piel;
ríos de magma que surcan el deseo.
El cielo se detiene, el amor respira;
intercambiamos miradas, sudores y saliva.
La locomotora ruge de nuevo,
acelera el pulso;
su destino está preñado en el filo del olvido.