El Derecho interno y derecho internacional
En opinión de Hertino Avilés
Hertino Avilés Albavera 
En México, se ha optado por una mayor apertura ante el panorama internacional, esto a partir de 1982 con la llegada del Neoliberalismo con el entonces presidente, Miguel de la Madrid, fomentando así un dialogo internacional que cambio la perspectiva del derecho.
Del mismo modo, los cada vez más frecuentes tratados internacionales firmados y ratificados por el Estado, las conferencias regionales y mundiales, y la presión de los organismos internacionales han influido en la modificación legislativa a fin de armonizar el ordenamiento jurídico interno con el internacional.
Lo que ha traído como consecuencia dos situaciones fundaménteles, la primera es lo relativo a Derechos Humanos, ya que, en este punto, es un quasi acuerdo doctrinal, en que el Estado tiene que acatar las resoluciones de los organismos internacionales siempre que México los hubiese ratificado, y que en caso contrario podrá hacer uso como un criterio orientador. Lo anterior sustentándolo en la búsqueda de una efectiva protección de los Derechos de las personas; es decir, que el Estado se obliga de manera unilateral y de Bona fide.
En este orden de ideas, nos encontramos con un panorama que en la teoría luce perfecto, sin embargo, surge una duda que al día de hoy sale a colación: ¿la armonización del sistema interno y la internacional resta legitimidad al Estado Mexicano?
Es de subrayarse que en la actualidad, existe una resistencia a dicha armonización, sobre todo en grupos de poder en el ámbito del derecho que se resisten a la perdida de sus intereses, y los cuales se basan en una supuesta afectación a la soberanía, y que contrario a ello, es de precisarse que esta armonía no afecta la soberanía, puesto que la idea de la misma ha evolucionado con el propio derecho, y ha permitido un mayor beneficio, puesto que expande las posibilidades de negociación y de dialogo, reduce tiempo y costos, y permite que las personas accedan con mayor facilidad a otros satisfactores.
Si bien los resultados pareciesen positivos, es una pregunta que seguirá abierta, y habrá que esperar el transcurso de algunos años para responderla.
