EL ASUNTO NO ES LLEGAR, SINO MANTENERSE

En opinión de Lorena Elizabeth Castillo

EL ASUNTO NO ES LLEGAR, SINO MANTENERSE

“Mujeres y hombres aman y lo hacen de maneras diferentes, con la creencia en la universalidad del amor y en que el amor es para unas y para otros, la vía privilegiada a la felicidad. Sin embargo, el amor encierra recovecos de dominio que generan desigualdad, lazos de dependencia, propiedad y privilegios e inequidad que a su vez generan frustración, sufrimiento, incluso daño.”

Arranca así un libro que leí hace algunos años y sigue siendo una maravilla para mí por su certera claridad. Se trata de Claves feministas para la negociación en el amor de la antropóloga e investigadora mexicana, especializada en etnología, Marcela Lagarde, quién lo publicó en 2001 y ha tenido varias ediciones y reimpresiones.

En el que se ha instaurada popularmente (y no sin el interesado “respaldo” publicitario y mercantilista) como el “mes del amor y la amistad”, resulta oportuno hacer un apretado resumen de algunas de las ricas ideas planteadas por la autora ya que, aun cuando el título tiene un enfoque feminista, el tratamiento de la obra apunta necesariamente a la relación de pareja, como se advierte en la cita inicial.

En sus cinco capítulos, la también activista política y académica, pasa revista al fenómeno contemporáneo del amor desde distintas perspectivas, como se puede leer: 1- Amor e identidad femenina, 2- El amor en la cultura occidental, 3- El amor a partir de la era burguesa, 4- Para deconstruir el amor como subordinación y dominio y 5- Hacia la negociación en el amor.  

Los subtítulos de cada capítulo nos dan una idea de los temas de la autora. En el primero: Seres del amor, seres para el amor, La biografía amorosa de las mujeres, Modernas y tradicionales: marcadas por el conflicto, Una filosofía amorosa diferente y Una revolución: el amor es histórico. Mientras que el segundo contiene definiciones y comparaciones entre el amor en el mundo griego, cristiano y la modernidad; así como Mujeres modernas con mitos tradicionales y Para poder amar hay que ser ciudadanas.

En el tercer capítulo tenemos la exposición de ideas como El amor burgués: una revolución histórica, Los tiempos del amor cortés, Una nueva moral sexual: el matrimonio y la heterosexualidad, El rito amoroso de los regalos, El más sofisticado de los sistemas de dominación y aquí pone ejemplos de parejas amorosa como la de los escultores franceses August Rodin y Camille Claudel, además del caso de la escritora suicida, Virginia Wolf.

El cuarto y quinto capítulos, Marcela Lagarde aborda fenómenos emocionales en torno al acontecimiento amoroso, como Entre mito y realidad: una continua frustración, Inventario de fantasías, Desilusión, desencanto, infelicidad, La envidia. Y finaliza con propuestas como La conciencia de tener el derecho a tener derechos, El reto de la independencia económica, Amor, sexo y dinero, Otra manera de ser hombres y de ser padres y cierra con Una nueva ética entre las mujeres.

Como puede verse, el libro reseñado es una guía para consulta de hombres y mujeres en este mes del amor y la amistad y, lo más importante, es que se puede adoptar como libro de cabecera para ambos, como una forma de darnos cuenta unas a otros y viceversa que siempre hay una explicación para cada problema en la pareja y, lo más importante, una alternativa para cada situación.

El objetivo es lograr que cada día sea motivo suficiente para preservar y acrecentar el amor y la amistad; recordando que, en el amor, como en muchas retos de los seres humanos, el asunto no es llegar, sino mantenerse.