Desafíos y retos del sistema político electoral mexicano

En opinión de Hertino Avilés

Desafíos y retos del sistema político electoral mexicano

Cada vez son menos los ciudadanos que confían en las instituciones gubernamentales y en su efectividad, cuestionando cada vez más la finalidad del actuar de las mismas, más aun el destino de los recursos que manejan y los resultados que ofrecen a los gobernados.

 

Según estudios de la Corporación Latinobarómetro, con sede en Chile, existe en nuestro país un alto nivel de insatisfacción respecto a la actual democracia representativa en el país, consistiendo en números porcentuales al 52% de los ciudadanos, siendo que el 49% considera que el gobierno del país más que consultar sobre políticas y temas de gran trascendencia, impone sus determinaciones; por lo que atañe a la respuesta de los gobernantes hacia la población, un 77% de la misma manifiesta que no se han resuelto los problemas sociales.

 

Al respecto de los partidos políticos, sólo el 4% de la ciudadanía mexicana confía en estos y en lo que representan, siendo que el mayor porcentaje de la población tiene poca o ninguna confianza en ellos. Un 66% de los mexicanos no confía en que las elecciones de nuestro país sean acordes a los principios democráticos plasmados en la Constitución Federal, misma que establece en su artículo 41 que “los partidos políticos, son Entidades de interés público que tienen como fin promover la participación del pueblo en la vida democrática y hacer posible el acceso de los Ciudadanos al ejercicio del Poder Público.”

 

Ante lo anterior, es de resaltar que los retos a los que se enfrentan los partidos políticos de nuestro país actualmente, consisten en garantizar un verdadero sistema democrático en su interior, una efectividad en la administración de justicia partidaria, el reconocimiento a la carrera que se desempeñe a su interior, así como levar a cabo una capacitación efectiva y constante de quienes los integran y desarrollar mecanismos eficaces dirigidos a la participación Ciudadana.

 

Por lo que se refiere al sistema democrático electoral que hoy existe en el país, tendrá los desafíos de la centralización de los procesos electorales, desarrollar una reforma política electoral previa al año 2021, afrontar la eventual desaparición de los órganos tanto electorales como jurisdiccionales en el país y las afectaciones que se presentan en la autonomía e independencia de estos órganos electorales nacionales, perfeccionando los mecanismos de designación de las magistraturas electorales.

 

Las instituciones electorales, deberán tener presente en todo momento un contexto global de las situaciones que atañen a nuestro país, fortalecimiento su contenido ideológico y posicionándose respecto de la nueva realidad política y electoral que se presenta en la sociedad mexicana, así como en relación de las candidaturas independientes y las alianzas electorales, procurando el financiamiento y la rendición de cuentas, cuidando aspectos de propaganda y de publicidad electoral, todo con la finalidad de respetar íntegramente los derechos, principios y máximas contenidas en la norma Constitucional.